viernes, 30 de diciembre de 2011

¿Hará bueno el 2012 al 2011? Publicado en Diario de Navarra el 3/1/2011

El nuevo Ministro de Economía Luis Guindos se estreno en el cargo anunciando que España había decrecido en el último trimestre de 2011 y que se esperan resultados negativos para el primer semestre de 2012. Algunos ya le han criticado por decir la verdad. ¿Acaso es mejor que mienta? La mayoría de analistas internacionales alertan de la contracción de la economía UE con riesgos de entrar en una depresión global. Francia va derecha a la recesión. El Reino Unido tiene el PIB estancado. Hasta Alemania parece que tendrá problemas en 2012 debido a la débil demanda de sus principales clientes europeos. Escuchar estos pronósticos es deprimente. Dan ganas de irse al pueblo a poner un huerto y criar gallinas.
Las políticas de demanda, es decir, de aumento del gasto público, no han dado los resultados esperados por sus ejecutores. La situación ha llegado a tal punto que hemos visto a países como Grecia, Irlanda o Portugal aferrarse a las ayudas del FMI para no hacer suspensión de pagos. Aún así, todavía siguen algunos, como el premio Nobel Paul Krugman, pidiendo que se siga por la vía de gastar más. ¿No han tenido suficiente con lo sucedido en 2010 y 2011? ¿Hasta dónde quieren aumentar la dimensión del problema? Como decía F. Hayek “Si vives a lo grande endeudándote con créditos baratos no me pidas remedios milagrosos para la resaca”. Estamos ante la mayor crisis financiera desde 1929. No hay dinero suficiente para tapar tantas necesidades de financiación. Warren Buffet dice que cuando llega la sequía del crédito es como cuando baja la marea. Entonces, es cuando se ve quién estaba nadando sin bañador. Y es que estos años se han tapado muchas vergüenzas con las socorridas refinanciaciones de la deuda.
Los empresarios miran los análisis macroeconómicos como los agricultores siguen el parte meteorológico. Con estas previsiones ¿quién se arriesgará a sembrar? A las personas físicas les pasa prácticamente lo mismo. Como dice la teoría de la demanda agregada las decisiones de gasto e inversión se toman con los recursos actuales pero también con la confianza que tengamos en nuestros ingresos futuros. Por lo tanto, estamos ante un círculo vicioso que debemos romper. Siguiendo con el símil inicial, nos encontramos en invierno y no es probable que en enero lleguemos a los 30 grados centígrados, pero la economía son ciclos y sabemos que llegará la primavera, la cuestión es cuándo.
La solución más socorrida, cuando podíamos, era devaluar la peseta. Tenía sus consecuencias negativas como el encarecimiento de los precios del petróleo y la inflación pero por otra parte conseguíamos competitividad de un plumazo. Y sin tener que esforzarnos en implantar reformas que nos hicieran más competitivos. Luis Garicano, catedrático de la London School of Economics, propone hacer reformas estructurales que incrementen la tasa de crecimiento a medio y largo plazo. Primero implantar el contrato único con indemnización creciente para evitar la dualidad del mercado laboral. El cuál es un mercado híper regulado. No tiene lógica que con 5 millones de parados se incremente el coste salarial. Aboga también por la descentralización de la negociación colectiva. Hay empresas que no encajan en el corsé que imponen los negociadores empresariales y sindicales, y hoy por hoy, (salvo excepciones) no tienen la capacidad de llegar a acuerdos con sus trabajadores por debajo del convenio. Faltan reformas sustanciales en los servicios profesionales y servicios locales como generadores de empleo. Y una reforma del mercado del alquiler que consiga movilizar el millón de viviendas vacías. España ha realizado reformas cuando ha sido necesario como Adolfo Suárez con la reforma política, Felipe González con la reconversión industrial y José María Aznar con la entrada en el euro. Esperemos que este Gobierno vaya más allá de subir los impuestos y aprobar la Ley Sinde.

Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía
economiapoliticaymas/blogspot.com

viernes, 4 de noviembre de 2011

Robin Hood y la Tasa a las transacciones bancarias (Publicado en Diario de Navarra el 7/12/2011)

En la pasada cumbre del G-20 se ha discutido la necesidad de implantar un impuesto a todas las transacciones bancarias mundiales: La famosa Tasa Tobin. Fue idea, del homónimo Premio Nobel de Economía, James Tobin en 1971. El objetivo de dicha recaudación sería aportar fondos que ayuden al tercer mundo. Aunque ningún país ha salido del desarrollo por la ayuda externa no deja de ser loable que haya ideas en esa dirección, aunque no sean efectivas. Es mejor enseñar a pescar que dar peces. Se supone que es una tasa en contra de los especuladores. Pero, ¿cómo diferencian la inversión productiva de la especulativa? Si quieren acabar así con los buitres financieros lo llevan crudo, porque estos se adaptan en milisegundos a las normas que quieran inventar. Esta tasa agravará el problema de financiación en el que estamos inmersos tanto Europa como USA. ¿Hace falta recordar que estamos en una crisis financiera? Mario Draghi, recién estrenado Gobernador del Banco de Europa, ha reducido los tipos de interés por los malos datos económicos, abandonando el control férreo de la inflación (no se le espera a corto plazo). Objetivos: abaratar la financiación en la zona Euro y tratar de favorecer el raquítico crecimiento económico.
Esta tasa solo se podría implantar si así lo decidieran todos los países del mundo incluidos los paraísos fiscales. De lo contrario, las transacciones financieras volarían a los estados de excepción a la velocidad de un clic de ratón. Tobin sugería que el dinero recaudado lo administrara el FMI o el Banco Mundial, centro de las iras de los grupos de indignados. El propio Premio Novel pidió, irritado, que no maltrataran su idea, su nombre y reputación para secundar fines espurios. Quizá por eso ahora le han cambiado el nombre por “Robin Hood Tax”. Resulta paradójico (y más habiendo nacido este movimiento en el Reino Unido¡) que no hayan caído en cuenta de que tienen que cambiar de personaje. Es una contradicción, que enarbolen el nombre de Robin Hood para imponer un nuevo impuesto, cuando el famoso arquero del bosque de Sherwood robaba los impuestos del Rey Juan y ¡No a los ricos¡. Es decir, justo lo contrario de lo que defienden estos grupos que no han leído el libro, ni visto la película, o no se han querido enterar. Incongruencias a parte, es un movimiento que ha tenido una fuerte influencia entre políticos como Rubalcaba en España o empresarios como Bill Gates que lo acaba de defender en la mencionada cumbre.
Las empresas necesitan a los bancos para financiar su actividad. Como dice el maestro Leopoldo Abadía: La economía es como el motor de un coche. El cuál para funcionar necesita aceite que engrase toda la mecánica. Cuando falta aceite las piezas empiezan a recalentarse y el motor estalla. Pues bien, la labor de la banca es la de engrase de la economía. Los bancos no son empresas. Bueno, quiero decir, que no son empresas “normales”. Pagan intereses por los depósitos, se apalancan (prestan más de lo que tienen en caja) y luego cobran un dinero a los prestatarios. Es en la segunda y tercera parte del negocio es donde tienen un peso primordial para la economía “real”. Deciden a quién y cuánto prestar basándose en la capacidad que van a tener de devolver lo prestado. Como el dinero escasea solo prestan a los grandes y fuertes, dejando de lado a las Pymes con las sobras. Y son estas las que generan empleo. Si implantamos medidas anti transacciones bancarias es como si metiéramos arena en el aceite del motor. Los bancos deben pagar impuestos de acuerdo a los beneficios que obtengan. Y si “los que mandan” quieren hacer algo en la buena dirección que dejen de financiar entidades quebradas y fomenten la competitividad. Que los que lo han hecho mal caigan para dejar paso a los que lo han hecho bien. Como los brotes verdes que crecen sobre los viejos árboles caídos en el bosque. Vaya lo de brotes verdes sin mala intención.

Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía
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domingo, 18 de septiembre de 2011

España no puede quebrar. Publicado en Diario de Navarra el 26 de septiembre de 2011

Llevamos meses escuchando que estamos en un pozo, que es el fin del mundo conocido, que todo se va a la porra, etc. Y en una especie de ruleta macabra se apuesta por la quiebra de Grecia, de Italia, de España o de todas ellas. Bloomberg, profesor de la Universidad de Boston, ha escrito un artículo muy interesante sobre la segunda suspensión de pagos de España bajo el reinado de Felipe II. Dicha suspensión fue más política que económica. Felipe II estaba muy endeudado pero su mayor problema era la imposibilidad de subir impuestos por la oposición de Las Cortes y el clamor popular. El pueblo no quería una subida de impuestos, y pedía que no se pagara a los prestamistas extranjeros. El impago de España produjo una reacción en cadena que arrastró a los prestamistas a una quiebra cierta. A los dos años, España suplicaba por una refinanciación y volver al status quo anterior. Felipe II suspendió pagos en 1557, en 1575 y la última en 1596. Aunque ya ha pasado más de 400 años, todavía se estudia y se recuerda. Si exceptuamos la Guerra Civil, la última bancarrota fue en el siglo XIX. Estados Unidos tampoco pagó la deuda de los estados Confederados y todo el mundo dice que nunca han suspendido pagos.

Pero, ¿puede, en la actualidad, quebrar un Estado? En el caso de la quiebra de una empresa, los acreedores nombran unos administradores. Estos revisan la deuda existente y la tratan de cuadrar con los activos de la compañía. Si éstos no llegan a cubrir la deuda, los fiadores tendrán que asumir la pérdida. Ahora bien, la suspensión de pagos de un país es muy distinta. William Rhodes, Presidente de Citigroup en los años 80, sentenció “Countries don´t go bankrupt”; algo así cómo: los países no entran en bancarrota. Si un país decidiera declararse en quiebra, dejaría de pagar una parte de sus deudas, como pasa con las empresas. Esto provocaría un cierre en seco de toda la financiación exterior en el país. Además, todo lo que exportase le sería confiscado en pago del saldo pendiente. Las deudas comerciales no tienen inmunidad diplomática. En la práctica, supondría verse cerrado al exterior con un impacto brutal sobre su economía. Y como siempre con consecuencias muy graves para la población, especialmente para los más pobres y desamparados. Normalmente, los ricos tienen recursos para sacar el dinero a tiempo.

La alternativa más común es que el país se siente a negociar con el FMI una nueva ampliación del pago de la deuda con un compromiso de pago de la misma en unas condiciones más laxas. Lo normal es que se alargue el plazo de devolución a cambio de aumentar sustancialmente el principal. Ahora bien, el país deberá comprometerse a cumplir con un severo ajuste de su gasto público y subidas de impuestos que aseguren el cobro de los plazos del préstamo. Por desgracia, al FMI le importa más cobrarse la deuda que las implicaciones económicas que se derivan de la aplicación de sus planes de ajuste. Obviamente, en este segundo caso, los recortes presupuestarios y subidas de impuestos provocarían más penurias para los más desfavorecidos. En muchos casos, el colapso que provocan los ajustes hace que se enquiste el círculo vicioso de ajustes y refinanciación de la deuda.

Decía Benjamin Graham, maestro del multimillonario Warren Buffet, que “Dado que el bono es una inversión con una rentabilidad limitada (tienen un tipo fijo, en el caso español el 5% a diez años), nuestra principal preocupación debe ser la de evitar perder dinero: La selección de bonos es sobre todo un arte negativo. Es un proceso que consiste en excluir y rechazar más que uno de buscar y acertar”. En definitiva, que debemos elegir la mejor rentabilidad entre los países que menos probabilidad tengan de quebrar. El bono griego está a un atractivo 21% anual para el inversor que le gusten las emociones fuertes. Yo no le arriendo la ganancia.

Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía
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¿Dónde está el dinero? Publicado en Diario de Navarra el 21 de septiembre de 2011

Las tensiones en los mercados se han vuelto a solucionar con una transfusión coordinada de unos cuantos billones de dólares entre los principales bancos centrales del mundo. La bolsa volvió a la senda alcista. Y los titulares de la prensa lo celebraron. A la evolución de la bolsa se le da demasiada importancia. Seguramente porque sus vaivenes consiguen alterarnos fácilmente. Pero en realidad a la bolsa, a corto plazo, le da igual lo que pase porque funciona con algo tan simple como la cantidad de dinero que hay en el mercado. A más dinero sube y si escasea baja. Parece cómo si a nuestra enferma economía solo le funcionasen bien las transfusiones. Y como si los Doctores que la cuidan no supieran otro tratamiento. Pero la gente no es tonta y pregunta “¿Dónde está el dinero?”

“Si no hacemos esto ahora, no vamos a tener una economía el lunes”. Esta apocalíptica frase, de película de miedo, la pronunció Ben Bernanke en 2008. Consiguió atemorizar al Congreso Americano para que le diera a la impresora y empapelaron de dólares el mundo entero. Quería parar la caída de naipes que provocó el desplome de Lehman Brothers en septiembre de aquel año. Me abstengo de poner la cantidad de dólares que han sido introducidos en el mercado financiero internacional. Sin olvidarnos de que sus colegas de los principales Bancos Centrales del mundo han hecho lo mismo. Pero para que nos hagamos una idea del tamaño de la deuda USA, bastaría decir, que si colocásemos billetes de 100 dólares apilados uno encima de otro superarían ampliamente el volumen del mayor de los rascacielos del mundo (les invito a que entren en http://usdebt.kleptocracy.us/ para que se hagan una idea visual).

Pero todo esto no fue suficiente. Pasados tres años seguimos teniendo una necesidad no cubierta de financiación. Empresas y emprendedores lo destacan como la principal dificultad que se encuentran en este momento. USA, supuesto paradigma liberal, nacionalizó bancos ante el miedo a que fueran comprados por los chinos o los árabes. Ante la tremenda onda expansiva que provocó la caída de Lehman. No se atrevieron a dejar caer a más entidades y optaron por la vía de nacionalizar las pérdidas. Con el riesgo moral que esto acarrea. Es indignante que si va bien se queden con los beneficios y si va mal, despidan a los máximos ejecutivos con indemnizaciones multimillonarias. La banca siempre gana. Y lo que es peor, ningún responsable (salvo el famoso Madoff) paga las consecuencias.

Bueno, vale, pero ¿Dónde está el dinero? El vil metal está dedicado a refinanciar a las entidades financieras y estados a los que nadie les fía ya. Los ingresos apenas cubren una pequeña parte de sus necesidades de liquidez. Son empresas quebradas de libro. Pero se ha decidido no dejarlas caer e ir inyectándoles billetes cuando la cosa se pone muy malita. El dinero que cobran lo dedican a reducir deuda, en el mejor de los casos. Toman ese dinero, recién impreso, para entregarlo a sus prestamistas. Y así una y otra vez, a la espera de que los famosos brotes verdes (los cuáles no tienen ni un duro para germinar) se conviertan en una realidad y volvamos a la senda de crecimiento. Se recuperen los ingresos y vuelta a empezar con una inflación galopante. La cuál beneficiará a los quebrados porque hará que su deuda sea cada vez más pequeña. Pero las tensiones financieras sobre Grecia están barajando la posibilidad de que quiebre y se lleve por delante a otros países. El presidente Obama dijo que el verdadero problema para la economía mundial es que caigan España o Italia. Habría que recordarle la parábola de la paja en el ojo ajeno. Hace poco más de un mes su país tuvo serios problemas para hacer frente a sus deudas. Probablemente nadie quiebre porque al final siempre nos queda poner a trabajar a la Real Fábrica de Moneda y Timbre. El agujero de septiembre ya está tapado. Ahora, a esperar al siguiente. ¿Será antes de fin de año?

Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía
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miércoles, 3 de agosto de 2011

Paro y Reforma Laboral (Publicado en Diario de Navarra el 1 de agosto de 2011)

La reforma laboral ya ha cumplido un año. Los cambios introducidos no han dado resultados y estamos prácticamente en el mismo sitio, pero un año más viejos. El estío ha dado la efímera alegría de presentar datos de reducción del paro. Lástima que solo sea un efecto estacional. Con el otoño volverán las discusiones a cerca de si llegamos a los cinco millones de parados. Qué poderoso influjo ejerce este número para los políticos de ambos bandos. ¿Será por no batir el record anterior?, o ¿por sacar la mano en el parlamento como algún jugador culé en el Bernabeu? Como decía Stalin, un muerto es una tragedia y un millón de muertos una estadística. Es mucho más duro ver la película “Los lunes al sol” de cinco parados con sus problemas y ansiedades, que leer en primera página que “casi” hay cinco millones de parados. Y yo pienso, ¿Qué más dará tener 5 ó 4,9 millones de parados? Pues sí que importa, y mucho, para esos cien mil trabajadores de diferencia. No se me olvida el caso de un sin techo que leí en este Diario hace unos meses. Era un Señor que vivía en la calle y subsistía de ayudas de la beneficencia. Había sido jefe de cocina de varios restaurantes pero por diversos avatares del destino (no relacionados con hábitos insanos) terminó durmiendo en la calle. Según él, a cualquiera nos puede pasar. La historia tuvo final feliz. Su aparición en el periódico le dio la notoriedad suficiente para recibir ayuda de un Señor que le regaló un traje y una Señora que le permitió dormir en una vivienda que tenía vacía. Recuperada la autoestima, contaba sus intenciones de volver a Francia a trabajar. ¿Qué habrá sido de él? No recuerdo el número de parados del mes pasado, pero si me emocionó aquella tragedia personal.

El gobierno alega que la economía sumergida es culpable de la abultada cifra. Ahora se va a penalizar el trabajo en negro con penas, hasta cinco veces, más duras que con la legislación anterior (otra vez el cinco). Los impuestos son una traba para arrancar negocios. A mi amigo Iván le han despedido. Nada raro en estos tiempos, incluso para él que estaba fijo (¿alguien cree todavía en la seguridad en el empleo? Sí, los funcionarios). Bueno, el caso es que fui a su casa y hablamos del futuro. Quería empezar una nueva actividad laboral por su cuenta. Pero se encontraba con que necesitaba el paro para poder subsistir. Si se da de alta deja de cobrar el paro. Y claro, le daba miedo invertir en su negocio y pasar de cobrar del Estado a pagarle. La tentación de trabajar en negro es muy grande en los estadios iniciales. La inversión, la poca facturación inicial y pagar los impuestos, le dejaban un margen insuficiente. Como ciudadano le eximiría de pagar impuestos durante 3 años, los que necesita para asentar su negocio y poder estabilizarlo. Pero sus competidores se quejarían de competencia desleal. La solución no es fácil.

Recientemente leí un estudio en el que se demostraba que las empresas que crean empleo no son ni las grandes ni las pequeñas, sino las nuevas. Si de esos 5 millones de parados (o los que sean) hubiera un 10% que decidiera ser autónomo, tendríamos medio millón de luchadores del día a día para atacar con ganas cualquier adversidad laboral. Y además, los que triunfaran de éstos, tendrían que contratar a otros. Esto no es una idea feliz mía. Entre 1996 con una tasa de desempleo del 22% y 2007 con el 8%, se creó cerca de 8 millones de empleos, de los que medio millón correspondieron a autónomos. La gran mayoría de esos 8 millones fueron contratados por los que decidieron tomar las riendas de su futuro laboral y dar un paso adelante. Sólo por el bienestar psicológico ya merece la pena. En el momento en el que te convences de que vas a emprender un negocio, ya no estás en el paro. Eres un emprendedor que lucha por sacar adelante su idea de negocio. Y lo digo porque lo he vivido en persona. No será fácil. Y si fracasa, lo mirarán de reojo y susurrarán “Mírale, ése es el que se ha arruinado”. En este país no hay tolerancia al fracaso. En USA no se fían de uno que no haya fracasado antes. Edison lo explicaba muy bien. Solía decir que sabía cómo no funcionaba cien mil veces una bombilla pero sólo conocía una forma de que brillara.

Carlos Medrano Sola
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jueves, 7 de julio de 2011

Aniversario de la Reforma Laboral (publicado en Diario de Navarra)

La reforma laboral ya ha cumplido un año. Los cambios introducidos no han dado resultados y estamos prácticamente en el mismo sitio, pero un año más viejos. El estío ha dado la efímera alegría de presentar datos de reducción del paro. Lástima que solo sea un efecto estacional. Con el otoño volverán las discusiones a cerca de si llegamos a los cinco millones de parados. Qué poderoso influjo ejerce este número para los políticos de ambos bandos. ¿Será por no batir el record anterior?, o ¿por sacar la mano en el parlamento como algún jugador culé en el Bernabeu? Como decía Stalin, un muerto es una tragedia y un millón de muertos una estadística. Es mucho más duro ver la película “Los lunes al sol” de cinco parados con sus problemas y ansiedades, que leer en primera página que “casi” hay cinco millones de parados. Y yo pienso, ¿Qué más dará tener 5 ó 4,9 millones de parados? Pues sí que importa, y mucho, para esos cien mil trabajadores de diferencia. No se me olvida el caso de un sin techo que leí en este Diario hace unos meses. Era un Señor que vivía en la calle y subsistía de ayudas de la beneficencia. Había sido jefe de cocina de varios restaurantes pero por diversos avatares del destino (no relacionados con hábitos insanos) terminó durmiendo en la calle. Según él, a cualquiera nos puede pasar. La historia tuvo final feliz. Su aparición en el periódico le dio la notoriedad suficiente para recibir ayuda de un Señor que le regaló un traje y una Señora que le permitió dormir en una vivienda que tenía vacía. Recuperada la autoestima, contaba sus intenciones de volver a Francia a trabajar. ¿Qué habrá sido de él? No recuerdo el número de parados del mes pasado, pero si me emocionó aquella tragedia personal.

El gobierno alega que la economía sumergida es culpable de la abultada cifra. Ahora se va a penalizar el trabajo en negro con penas, hasta cinco veces, más duras que con la legislación anterior (otra vez el cinco). Los impuestos son una traba para arrancar negocios. A mi amigo Iván le han despedido. Nada raro en estos tiempos, incluso para él que estaba fijo (¿alguien cree todavía en la seguridad en el empleo? Sí, los funcionarios). Bueno, el caso es que fui a su casa y hablamos del futuro. Quería empezar una nueva actividad laboral por su cuenta. Pero se encontraba con que necesitaba el paro para poder subsistir. Si se da de alta deja de cobrar el paro. Y claro, le daba miedo invertir en su negocio y pasar de cobrar del Estado a pagarle. La tentación de trabajar en negro es muy grande en los estadios iniciales. La inversión, la poca facturación inicial y pagar los impuestos, le dejaban un margen insuficiente. Como ciudadano le eximiría de pagar impuestos durante 3 años, los que necesita para asentar su negocio y poder estabilizarlo. Pero sus competidores se quejarían de competencia desleal. La solución no es fácil.

Recientemente leí un estudio en el que se demostraba que las empresas que crean empleo no son ni las grandes ni las pequeñas, sino las nuevas. Si de esos 5 millones de parados (o los que sean) hubiera un 10% que decidiera ser autónomo, tendríamos medio millón de luchadores del día a día para atacar con ganas cualquier adversidad laboral. Y además, los que triunfaran de éstos, tendrían que contratar a otros. Esto no es una idea feliz mía. Entre 1996 con una tasa de desempleo del 22% y 2007 con el 8%, se creó cerca de 8 millones de empleos, de los que medio millón correspondieron a autónomos. La gran mayoría de esos 8 millones fueron contratados por los que decidieron tomar las riendas de su futuro laboral y dar un paso adelante. Sólo por el bienestar psicológico ya merece la pena. En el momento en el que te convences de que vas a emprender un negocio, ya no estás en el paro. Eres un emprendedor que lucha por sacar adelante su idea de negocio. Y lo digo porque lo he vivido en persona. No será fácil. Y si fracasa, lo mirarán de reojo y susurrarán “Mírale, ése es el que se ha arruinado”. En este país no hay tolerancia al fracaso. En USA no se fían de uno que no haya fracasado antes. Edison lo explicaba muy bien. Solía decir que sabía cómo no funcionaba cien mil veces una bombilla pero sólo conocía una forma de que brillara.

Carlos Medrano Sola
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jueves, 30 de junio de 2011

Racionalidad y los orígenes del capitalismo según Max Weber

Hoy presento en el blog a mi amigo el filosofo Juan Diego Ramírez que nos disertará sobre la figura de Max Weber y los orígenes del capitalismo. Os recomiendo su lectura y animo a que comentéis sus argumentos.

No estaría de mas comenzar diciendo, que Max Weber es uno de los mas importantes intelectuales que ha dado Europa y occidente a lo largo y ancho del siglo veinte, sin embargo aun no ha sido reconocido como tal, las razones de esta impostura, al menos a mi me son completamente desconocida, bastaría mencionar sus trabajos ,como la ética protestante, la sociología de la religión, el político y el científico, para darnos cuenta de que tenemos delante de nosotros a un intelectual de cualidades extraordinarias.
Sus trabajos abarcan casi tanto como en su época ocuparon los trabajos de Aristóteles, sin embargo su destino intelectual no ha sido merecidamente considerado, es de sospechar que debido a cuestiones ideológicas no ya solo en el ámbito académico alemán como en el resto de Europa occidental. No obstante somos muchos quienes admiramos la claridad, profundidad y estilo de los estudios que ocupo buena parte de la vida de Weber tras abandonar la docencia por motivos de salud, retirado de la docencia Weber se dedico a viajar y a documentarse para después abordar los escritos mas polémicos de su trayectoria profesional sin lugar a dudas la ética protestante constituye un aldabonazo en los estudios históricos y sociológicos, dominado el ambiente ,como estaba en la época, dominada por la sociología marxista ortodoxa, la inteligencia de Max Weber y lo que de novedoso aporta al método de las investigaciones sociológicas ,es la introducción en este campo el concepto mencionado en el titulo de este ensayo, como racionalidad, que es en su forma un concepto a su vez histórico y sociológico.
En este magistral estudio sobre la relación existente entre el capitalismo occidental y el desarrollo de las sectas calvinistas y su ideal ascético de la vida es donde Weber sitúa el ascenso de las clases poderosas económicamente en Europa y Norteamérica, así como sitúa históricamente la relación entre educación profesional y protestantismo frente a educación humanística y catolicismo. Las estadísticas que maneja Weber no dejan de sorprender quizás mas aun hoy cuando nos preguntamos sobre los orígenes de nuestro tiempo porque dilucida enormemente el abismo que separa dos tradiciones opuestas, por un lado el del católico frente al del protestante y sus respectivas cosmovisiones frente al trabajo. En efecto el concepto norteamericano y alemán de profesión encierra un significado específicamente religioso (calling en ingles, gerouf en alemán)
Weber analiza los textos donde esta al menos en origen lo que el denomina espíritu del capitalismo, en concreto extractos de la biografía de Benjamín Franklin, donde aparece exacta y acertadamente, con toda claridad el ethos del capitalismo occidental en su forma originaria, en textos de marcado cariz religioso, bajo un manto ético de aparente utilitarismo, en definitiva el texto ofrece sin concesiones la relación existente entre una ética religiosa y el capitalismo occidental.
Ahora entremos en el asunto que da titulo a este articulo, y veremos a lo largo de el que quiere decir Weber bajo el concepto de ética y racionalidad, el tema es complejo y la obra de Weber densa, de modo que vamos a proceder analizando algunos extractos del prefacio de la ética protestante y el espíritu del capitalismo. Así pues expuesto el tema vamos a ver hasta donde nos es posible llegar, tras el análisis histórico y sociológico del concepto que es también el análisis de toda la historia de occidente.
En el estudio mencionado sobre el surgimiento del capitalismo, concretamente en su prefacio dice Weber:
“Solo en occidente hay ciencia en aquella fase de su evolución que reconocemos como valida actualmente no dudarlo también en otras partes ha habido conocimientos empíricos, meditación sobre los problemas del mundo y de la vida……..
………Pero a la astronomía de los babilonios, como cualquier otra le faltó la fundamentacion matemática que los helenos fueron los primeros en darle”
paralelamente en una serie de conferencias sobre la política como vocación y la ciencia como vocación, en la mencionada ciencia como vocación dice lo siguiente, se expresa en los siguientes términos:
………..por el descubrimiento reciente de uno de los mayores instrumentos del conocimiento científico, el concepto”
Podríamos enumerar párrafos enteros en los que Weber, profundo conocedor de la cultura griega, se refiere en estos términos mismos, a la determinante aportación de los griegos a la cultura occidental. Ellos y solo ellos inventaron la filosofía, desde el momento que aplicaron el conocimiento de la matemática y geometría al pensamiento y que es fácilmente identificable en todas la historia del pensamiento de occidente. Pero hay algo que Weber en estos escritos mencionados no comenta y que nosotros hoy sabemos a ciencia cierta y con toda seguridad, la aportación de la escritura como modo de transmisión de valores y conocimientos; es una contribución que los griegos aplicaron a su civilización, como han demostrado Eric Havelock en su excelente pero criticable libro, prefacio a Platón, en el expone detalladamente como Platón y otros filósofos están a caballo entre formas de expresión racional y poéticas, creyendo Havelock ver en ello que platón y toda la teoría educativa de la republica se debe exclusivamente a la aparición de la escritura en el seno de la civilización griega. ¿Cual es la diferencia y porque apareció y se relaciona la escritura con la aparición de la ciencia en Grecia y su filosofía, si escritura a habido en todas partes y no han desarrollado un pensamiento orientado a la critica de toda una sociedad, como la que aborda Platón en su Republica?
Vamos a citar ahora a un antropólogo llamado Ernest Gellner, que puede salir muy bien en nuestra ayuda. En un libro titulado antropología y política, que son en realidad una serie de artículos compilados dice que la escritura esta asociada, desde sus orígenes ,al servicio de una sociedad dividida en estratos sociales horizontales, en un una sociedad donde el poder emana de arriba a abajo, en las castas superiores figura la escritura como una forma de dominación entre los hombres y cuyas funciones pertenecen o van asociadas a una casta que solo ella conoce el funcionamiento y solo ellos son capaces de descifrar el código de la letra escrita. Históricamente es valido esto totalmente en los grandes Estados arcaicos, es decir en aquellas formas de organización política que se desarrollaron en el mediterráneo (Egipto y Babilonia principalmente) prematuramente a diferencia de la aparición del Estado moderno que se desarrollo o se fue desarrollando poco a poco como poderes autónomos en el siglo catorce (baja edad media) a medida que se separaron de los poderes eclesiásticos y de la Iglesia Romana, ahí radica a mi juicio lo que se podría denominar el germen de los futuras naciones europeas y después de la reforma protestante, después en el diecinueve europeo se desarrollarían los nacionalismos alemán e italiano, pero estos serian inspirados por textos románticos principalmente y corrientes afines hasta concretarse en una independencia nacional de Estados independientes una vez eliminados los elementos adversos.
Hecho este pequeño excursus, vamos a retomar el tema central.
Habíamos dicho que fueron los griegos quienes inventaron la filosofía debido a la introducción del texto escrito, y desarrollaron el pensamiento racional estructurado debido a la introducción del texto escrito mas o menos durante el siglo séptimo antes de cristo, pero no hemos hablado de los parámetros de esa escritura, ahora podemos preguntarnos ¿fue la adaptación de la escritura fenicia a un sencillo sistema de signos el germen de un cambio radical en la mentalidad griega como han supuesto Havelock y otros estudiosos como Milman Parry? evidentemente no, en el caso griego concretamente la aparición de la escritura no supuso un cambio radical de mentalidad, es decir no supuso un cambio brusco del cambio de una mentalidad oral a una escrita , un ejemplo de ello fue que Sócrates no escribió nada todas sus enseñanzas fueron orales, y es el filosofo que mas influencia ha ejercido a lo largo de toda la historia de la filosofía.
Un dato muy relevante también, es el hecho de que la escritura en el mundo griego no fue concebida para leerla en privado, si no que frecuentemente era utilizada para utilizarla como un recurso mnemotécnico. Como podemos ver con estos ejemplos, la teoría de Havelock falla en cierto sentido debido a que no encontramos una concepción de una escritura, en el mundo griego como lectura interiorizada, esta solo se produjo tardíamente, en el mundo griego solo aparece como un mero recurso mnemotécnico.

Una vez hecho este pequeño recorrido vamos a continuar con lo que hablábamos al principio y veremos que el concepto de racionalidad Weber no solo señala su origen en la filosofía y el pensamiento de los griegos si no que se perpetua en otras disciplinas tanto artísticas como económicas, veamos un ejemplo al respecto. En la ética protestante dice continuando con lo expuesto al comienzo de este artículo: “ninguna civilización ha conocido la química racional.” Después añade Maquiavelo tuvo precursores en la India. ero a la teoría asiática del Estado le falto una sistematización semejante a la aristotélica y toda suerte de conceptos racionales”

Continua así durante su esplendido prefacio ampliamente elaborado, en lo referente a la arquitectura dice lo siguiente:
“El arco de ojiva se conoció en la Antigüedad y en Asia como elemento decorativo…….
…….Pero fuera de Occidente no se conoce la utilización racional de la bóveda gótica.
Evidentemente todo es cierto, sobre todo en lo referente a esta ultima afirmación.”
Si contemplamos una catedral gótica no es solo ese elemento el utilizado racionalmente sino muchos elementos mas, aun cuando la finalidad de un orden arquitectónico de esas dimensiones es religioso las soluciones que ofrece arquitectónicamente son perfectas y racionalmente construidas, en ellas ya no predomina el aspecto didáctico que caracterizaba al románico del siglo doce sino que el gótico busco la mejor manera de resolver los problemas de sujeción con muros contrafuertes y arbotantes para liberar el interior cargando en los elementos de sujeción en el exterior, así se elevaron los ventanales y vidrieras para ponerlo al servicio del simbolismo cristiano.
Y por fin llegamos al aspecto que mas interesa a Weber, en el final del prefacio dice lo siguiente:
“……en este sentido, ha habido capitalismo y empresas capitalistas en todos los países civilizados del mundo hasta donde alcanzan nuestros conocimientos…...
……..pero hay en occidente un capitalismo que no se conoce en ninguna otra parte de la tierra: la organización racional capitalista del trabajo formalmente libre.”
Si tenemos en cuenta todos los aspectos históricos mencionados anteriormente en los que predomina el elemento racional desde los griegos, veremos que en el mundo moderno no hay ruptura en ese aspecto si no que aparece en la Modernidad con especial énfasis en la ideología del trabajo y la actividad capitalista , que anteriormente ni en ninguna época, según Weber habían existido, todo el análisis de Weber durante su obra es un análisis sobre como se ha producido este fenómeno de especial importancia para nuestro mundo contemporáneo. La conclusión que podemos sacar de ello sin hacer moralismo ni introducir ideas de marcado subjetivismo es como señala Max Weber contrariamente a Kart Marx, no es en la practica, dentro de la sociedad, la infraestructura el papel determinante de la Historia, si no que ocurre mas bien al revés de los que postulan el materialismo histórico, si no y para concluir como dice Weber:”
“el espíritu del capitalismo existió con anterioridad al desarrollo del capitalismo….
…….en este caso (refiriéndose a Massachussets siglo diecisiete) la relación causal es la inversa de la que habría que postular desde el punto de vista del materialismo.



Bibliografía utilizada:

La ética protestante y el espíritu del capitalismo Max Weber. edit península.

El político y el científico. Max Weber. alianza editorial

Antropología y política. Ernest Gellner .editorial gedisa.

Prefacio a Platón. Eric Havelock .literatura y debate critico.

domingo, 26 de junio de 2011

Todos a la cárcel

“Evidentemente todas las personas han hecho algo para que el país esté mal. Si todas las personas hubieran hecho otra cosa quizás no estaríamos en esta crisis. Pero, claro, esto, te vas... a la acampada de Sol y dices: 'La culpa es vuestra' y de ahí sales mal.” Pau García-Milà, joven y exitoso emprendedor de 23 años, pronunció la frase precedente en el último congreso Red Innova. Fue duramente criticado en las redes sociales por afirmar esta y otras perlas como "España es el país de la queja" o por su propuesta "Si uno de cada diez de los despedidos montaran su empresa y de esos acabara triunfando un 10%, a la larga se resolverían muchos de los problemas”. No deja de ser cierto que a nadie le han obligado con una pistola a contratar una hipoteca o a comprar un segundo piso para especular con él. Somos adultos y por ello, debemos ser responsables de nuestros actos. No vale equivocarse y mirar hacia arriba para echar la culpa a “los que mandan”. Equivocarse es humano y echarles la culpa a los demás es más humano todavía. El ex presidente de Islandia Geir H. Haarde es el primer mandatario que se ha puesto delante de un tribunal de justicia para defender su inocencia. Pretenden hacerle responsable, a conciencia o por negligencia grave, de la gestión ante la crisis financiera. Haarde está acusado de no haber informado de los problemas de los tres mayores bancos de su país. Estos estaban asumiendo riesgos muy peligrosos que condujeron, con la explosión de la burbuja inmobiliaria, a la quiebra del sistema financiero islandés y por extensión de importantes bancos holandeses y británicos que invertían en la pequeña isla volcánica. Ante las reclamaciones holandesas e inglesas, el gobierno islandés decidió asumir la deuda como suya, es decir, que la quiebra de los bancos islandeses la fueran a pagar los contribuyentes (vamos, los de siempre). Los ciudadanos se negaron, en dos referéndums, a pagar una deuda que suponía un tercio del PIB. El gobierno cayó y el nuevo ejecutivo ha abierto una investigación. ¿Es suficiente castigo que pierda las elecciones? o ¿Debe un mandatario responder personalmente ante los tribunales?¿Y sus asesores?¿Y qué hay de la responsabilidad subsidiaria de su partido? La pequeña Islandia va a vivir el experimento inédito de juzgar a un ex presidente por su mala gestión. Pero la lejana isla no está tan distante como parece. No hace mucho nos llegaban sus nubes volcánicas y colapsaban el espacio aéreo europeo. ¿Llegarán también los nubarrones justicieros a reclamar a nuestros gobernantes?

Aquí, unos culpan al gobierno y éste se defiende alegando que el problema venía de atrás y de allende los mares. Ambos tienen parte de razón, pero si vamos mirando culpables pretéritos llegaremos hasta el pecado original. Pero, ¿Quién es el responsable de la crisis actual? ¿Ha habido negligencia constitutiva de delito? Hace unos días Miguel Ángel Fernández Ordóñez, presidente del Banco de España, alegaba que ellos advirtieron, tempranamente, del peligro de nuestra burbuja inmobiliaria al gobierno. Pero ¿Y cuál es su responsabilidad como máximo ejecutivo de la inspección financiera de nuestros bancos y cajas? Si es cierto que vio el peligro, ¿Por qué no intervino antes? La autocrítica brilla por su ausencia. Es lógico, nadie quiere colgar con el sambenito. Como la célebre película de Berlanga, deberían acabar todos en la cárcel. Hombre, todos es mucha gente, pero ¡Nadie¡ En todo el mundo solo ha tenido repercusión mediática el caso del estafador Bernie Madoff. Está claro que la mayoría se van a ir de rositas. Son muchos más los directivos que han salido escandalosamente remunerados en un finiquito multimillonario que los que han visto sus huesos en la cárcel. Algún caso de mala gestión no se ha resuelto ni con el despido, y los errados ejecutivos se han transmutado en los salvadores del desaguisado. Un sistema que no hace pagar las consecuencias a los que han obrado mal es injusto por naturaleza. Es algo básico que los que lo hacen mal deben caer, pagar las consecuencias y dejar paso a los que lo han hecho bien. Un orden en el que no haya consecuencias a los actos es perverso en sí mismo y genera indignados en masa. La cuestión que hay que delimitar es la línea que separa la responsabilidad penal de la personal y de eso se encargan los jueces, si les dejan.


Carlos Medrano Sola
http://economiapoliticaymas.blogspot.com/




miércoles, 1 de junio de 2011

No con mi dinero (publicado en el Diario)

César Alierta, Presidente de Telefónica, presentó ante la Junta de Accionistas un plan de incentivos de 450 millones de euros (setenta y cinco mil millones de pesetas) para sus directivos y otro plan, pactado y voluntario, de despidos de 8.500 trabajadores. La primera medida la propuso para evitar que sus directivos busquen mejores oportunidades en otras empresas del sector. La segunda porque la tecnología facilita que no necesiten tener el doble de empleados que sus competidores cosa que “si la compañía no se hubiera anticipado, Telefónica estaría quebrada” afirmó Alierta. Esto parece razonable hasta cierto punto. Telefónica acaba de presentar unos beneficios record, para la compañía, superiores a 10.000 millones de euros. Este pequeño detalle hace que sus planes sean una auténtica obscenidad. El gobierno ha contestado que va a cambiar la ley para que los EREs de empresas con beneficios no sean costeados por el erario público. Y es que es escandaloso que además paguemos a escote lo que debe repercutir únicamente en dichas empresas. ¡No con mis impuestos¡. Valeriano Gómez, Ministro de Trabajo, advirtió de que “prefiere” que los costes de las reestructuraciones de empresas con beneficios no sean soportados por las arcas públicas. La cuestión es que Telefónica ya ha presentado su ERE con la normativa actual. Consecuentemente, pagaremos los 300 millones de euros que suponen sus prejubilaciones. Solo 150 millones menos de lo que se van a repartir entre los directivos.

Probablemente las decisiones planteadas sean las mejores para los accionistas de Telefónica. Cuando una compañía presenta un fuerte recorte de empleo inmediatamente suben sus acciones en bolsa. Las compañías se hacen más eficientes quitándose la grasa y dejando solo el músculo. Pero yo como cliente les critico y espeto un ¡No con mi dinero¡. No critico la necesidad de los ajustes, probablemente tengan razón para que la empresa sea más competitiva, para rejuvenecer la plantilla, etc. Lo que me desagrada son las formas tan burdas y con tal indiferencia por las personas. Las mismas personas a las que les engatusan a la hora de motivarles con seguridad en el empleo, planes de carrera y frases grandilocuentes hasta que los empaquetan en un ERE. En la misma junta de accionistas un directivo de la operadora jugaba a los marcianitos en su Ipad mientras anunciaban los despidos. Así pues cuando se lee la propia memoria de R.S.C. (Responsabilidad Social Corporativa) “En la medida en la que el Grupo Telefónica sea capaz de generar un impacto positivo con su actividad en el progreso económico, tecnológico y social de su entorno, y de ganar la confianza de sus grupos de interés, será capaz de garantizar su propia sostenibilidad como empresa” no parecen más que palabras bellas pero vacías. Mi queja es un canto al Sol. No llega ni a la suela de la sandalia de David contra Goliat. Pero cuidado, que no se confíen demasiado. Si buscan Telefónica en Facebook (Red Social que tiene más búsquedas diarias que Google) aparece en segundo lugar un grupo de boicot por los bonus aderezados con despidos. ¿Qué opinará el responsable de comunicación de esto? Y es que en la era de la comunicación los clientes incluimos, a la hora de decidir, más ingredientes que los clásicos calidad-precio.

Casualmente, ayer recibí una llamada de un teleoperador que me ofrecía los servicios de Telefónica con un interesante descuento como gancho. Le escuché educadamente pero le dije que recientemente había decidido no ser cliente de Telefónica. Él me preguntó por el motivo y yo se lo expliqué. Me dijo que no tenía ni idea de esos planes. Le contesté que estaban en toda la prensa nacional. En ese momento me di cuenta de que mi interlocutor no estaba en España. Efectivamente, llamaba desde Perú y no era trabajador de Telefónica. Pues te has librado por ahora, le dije. Él hizo un último intento de venderme su oferta pero me volví a negar, eso si, le pedí que transmitiera el motivo de mi negativa, por si acaso servía para algo. Tomo nota, me dio las gracias y se despidió.


Carlos Medrano Sola
http://economiapoliticaymas.blogspot.com/






martes, 24 de mayo de 2011

5 millones de parados

Qué poderoso influjo ejerce este número para los políticos de ambos bandos. ¿Será por no batir el record anterior?, o ¿por sacar la mano en el parlamento como algún jugador culé en el Bernabeu?, o ¿Será por la mala rima? Como decía Stalin, un muerto es una tragedia y un millón de muertos una estadística. Es mucho más duro ver la película “Los lunes al sol” de cinco parados con sus problemas y ansiedades, que leer en primera página que “casi” hay cinco millones de parados. Y yo pienso, ¿Qué más dará tener 5 ó 4,9 millones de parados? Pues sí que importa, y mucho, para esos cien mil trabajadores de diferencia. No se me olvida el caso de un sin techo que leí en este Diario hace unos meses. Era un Señor que vivía en la calle y subsistía de ayudas de la beneficencia. Había sido jefe de cocina de varios restaurantes pero por diversos avatares y desgracias (no relacionadas con alcohol o drogas, ni nada por el estilo) terminó durmiendo en la calle. Según él, a cualquiera nos puede pasar. La historia tiene final feliz. Su aparición en el periódico le dio la notoriedad suficiente para recibir ayuda de un Señor que le regaló un traje y una Señora que le permitió dormir en una vivienda que tenía vacía. Recuperada la autoestima, contaba sus intenciones de volver a Francia a trabajar. ¿Qué habrá sido de él? No recuerdo el número de parados del mes pasado, pero si me emocionó aquella tragedia personal.

Parece que la economía sumergida es culpable de la abultada cifra. Ahora se va a penalizar el trabajo en negro con penas, hasta cinco veces, más duras que con la legislación anterior (otra vez el cinco). Soy de la opinión del emérito gurú de las finanzas personales D. Leopoldo Abadía: los impuestos son una traba para arrancar negocios. A mi amigo Iván le han despedido. Nada raro en estos tiempos, incluso para él que estaba fijo (¿alguien cree todavía en la seguridad en el empleo? Sí, los funcionarios). Bueno, el caso es que fui a su casa y hablamos del futuro. Quería empezar una nueva actividad laboral por su cuenta. Aprovechar sus conocimientos en el mantenimiento industrial para ofrecer sus servicios solucionando pequeños arreglos domésticos. Pero se encontraba con que necesitaba el paro para poder subsistir. Si se da de alta deja de cobrar el paro. Y claro, le daba miedo invertir en su negocio y pasar de cobrar del Estado a pagarle. La tentación de trabajar en negro es muy grande en los estadios iniciales. La inversión, la poca facturación inicial y pagar los impuestos, le dejaban un margen insuficiente. Como ciudadano le eximiría de pagar impuestos durante 3 años, los que necesita para asentar su negocio y poder estabilizarlo. Pero nos encontramos con el problema de la competencia desleal. El problema a resolver es que sus competidores se quejarán de no disfrutar de esa exención fiscal. La solución no es fácil.

Recientemente leí un estudio en el que se demostraba que las empresas que crean empleo no son ni las grandes ni las pequeñas, sino las nuevas. Si de esos 5 millones de parados (o los que sean) hubiera un 10% que decidiera ser autónomo, tendríamos 500.000 luchadores del día a día para atacar con ganas cualquier adversidad laboral. Y además, los que triunfaran de éstos, tendrían que contratar a otros para que les ayudaran a sacar adelante su trabajo. Esto no es una idea feliz mía. Entre 1996 con una tasa de desempleo del 22% y 2007 con el 8%, se creó cerca de 8 millones de empleos, de los que medio millón correspondieron a empleadores. La gran mayoría de esos 8 millones fueron contratados por los que decidieron tomar las riendas de su futuro laboral y dar un paso adelante. Sólo por el bienestar psicológico ya merece la pena. En el momento en el que te convences de que vas a emprender un negocio, ya no estás en el paro. Ahora eres un emprendedor que lucha por sacar adelante su idea de negocio. Y lo digo porque lo he vivido en persona. No será fácil. Y si fracasa, lo mirarán de reojo y susurrarán “Mírale, ése es el que se ha arruinado. Pobre infeliz”. En este país no hay tolerancia al fracaso. En USA no se fían de uno que no haya fracasado antes. Edison lo explicaba muy bien. Solía decir que sabía cómo no funcionaba cien mil veces una bombilla pero sólo conocía una forma de que brillara.

sábado, 7 de mayo de 2011

Emprendedores e Inspiración

Dos poemas inspiradores para el emprendimiento y para disfrutar.

Ítaca. Kavafis:
Si vas a emprender el viaje hacia Ítaca
pide que tu camino sea largo,
rico en experiencia, en conocimiento.
A Lestrigones y a Cíclopes,
o al airado Poseidón nunca temas,
no hallarás tales seres en tu ruta
si alto es tu pensamiento y limpia
la emoción de tu espíritu y tu cuerpo.
A Lestrigones ni a Cíclopes,
ni al fiero Poseidón hallarás nunca,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no es tu alma quien ante ti los pone.

Pide que tu camino sea largo.
Que numerosas sean las mañanas de verano
en que con placer, felizmente
arribes a bahías nunca vistas;
detente en loa emporios de Fenicia
y adquiere hermosas mercancías,
madreperlas y coral, y ámbar y ébano,
perfúmenes deliciosos y diversos,
cuanto puedas invierte en voluptuosos y delicados perfumes;
visita muchas ciudades de Egipto
y con avidez aprende de sus sabios.

Ten siempre a Ítaca en la memoria.
Llegar allí es tu meta.
Mas no apresures el viaje.
Mejor que se extienda largos años;
y en tu vejez arribes a la isla
con cuanto hayas ganado en el camino,
sin esperar que Ítaca te enriquezca.
Ítaca te regaló un hermoso viaje.
Sin ella el camino no hubieras emprendido.
Mas ninguna otra cosa puede darte.
Aunque pobre la encuentres, no te engañará Ítaca.
Rico en saber y vida, como has vuelto,
comprendes ya qué significan las Ítacas.

(Constantino Kavafis, 1863-1933, Poesías completas, XXXII)





NO TE DETENGAS de WALT WHITMAN
No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tú puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores:
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes.
Huye.
"Emito mis alaridos por los techos de este mundo",
dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente,
sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros "poetas muertos",
te ayudan a caminar por la vida
La sociedad de hoy somos nosotros:
Los "poetas vivos".
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas ...

Versión de: Leandro Wolfson

lunes, 2 de mayo de 2011

¡Basta de recortes¡ (publicado en el Diario el 2 de mayo de 2011)

Vivimos una carrera de recortes empresariales. Algunos muy necesarios para acabar con los excesos pretéritos. Pero esta reacción producida en cadena hace que todos suframos las consecuencias de caer en la misma trampa. Entramos en un círculo vicioso de recortes en cascada, como si fuéramos una fila de piezas de dominó. Los ajustes son una epidemia. Como consecuencia, todos somos más pobres porque yo compro menos, tú compras menos, etc. Estas estrategias sólo empeoran la situación. Si estamos en un pozo, ¡Dejemos de cavar¡ No quiero animar a que consumamos a lo loco, como algún político propuso no hace mucho tiempo. La semana pasada le pregunté al dueño de una empresa, al que quería ofrecer mis servicios, ¿Cuándo has recortado todo lo que has podido?, ¿Qué te queda? Y él me contestó; “Descansar en paz” Nos reímos un rato con su ocurrencia y coincidimos en que algo tendremos que hacer. La alternativa, para algunos, es esperar a que escampe. Seguir la táctica del avestruz. Estamos petrificados no vaya a ser que me quede sin empleo, o que pierda mi empresa, o que este cliente no me pague, o que no pueda pagar las nóminas a mis trabajadores, o que tenga que despedirles y no tenga ni telarañas en la caja fuerte. El que teme arruinarse ya sufre con el temor. Hay miedo en los ojos de los parados, de los empresarios y de la sociedad entera. Tenemos que enfrentarnos a las pérdidas, a los despidos y a inversiones fallidas. Y eso duele. Si nuestras empresas cancelan las cuentas de marketing, despiden comerciales y anulan todas las promociones, no hay que ser muy listo para saber que venderemos menos. La solución no es recortar más. ¡Es ingresar más¡ Hay que vender más. Si no se puede en España habrá que hacer la maleta y recorrer el mundo entero. Los países de la OCDE crecen por encima del 3%. ¡Alguna oportunidad habrá¡ Hasta que no cambiemos el chip, no saldremos de ésta.

El inventor de la venta por catálogo fue Montgomery Ward. Fue un exitoso pionero y disfrutó de las ventajas de ser el primero. Hasta que la Gran Depresión de 1929 a punto estuvo de quebrar su compañía. Su “salvador” fue un abogado llamado Sewel Avery. Éste impuso una serie de recortes drásticos mientras sus competidores se expandían. Fue un gran acierto y consiguieron superar la crisis. Después de la Segunda Guerra Mundial comenzó una recuperación paulatina de la economía, pero Avery se negó a verla. Se empecinó en mantener una rígida y austera economía de mínimos. No quiso arriesgarse a invertir ni a expandir el negocio de ninguna manera. Como resultado, las ventas de la compañía disminuyeron un 10% mientras su rival Sears duplicaba sus ventas. En poco tiempo, la primera empresa mundial de venta por catálogo desapareció arrasada por sus competidoras. Y Sewel Avery murió pensando que a la vuelta de la esquina vendría otra Gran Depresión. Su exceso de celo, visión inflexible y empecinamiento estratégico produjo el fin de una empresa pionera. En las empresas han proliferado los “Averys” y se ha arrinconado a los emprendedores al cajón de los recortes. Los ejecutivos pesimistas y negativos han ganado peso en los Comités de Dirección. No en vano, sus gestiones han salvado a las empresas de caer en el pozo de los locos soñadores arruinados. Pero esto ya es pasado. Ahora toca movernos de nuevo. Si antes necesitábamos cuatro visitas para conseguir un nuevo cliente, ahora tendremos que hacer ocho o buscarlo en otros países. Si no lo hacemos, otros vendrán que nos barrerán del mapa. En estos días de incertidumbre hay que ser cauteloso, pero ninguna actividad humana está exenta de riesgo. Me contaba mi abuelo que unos vecinos suyos le daban vueltas a comprar, o no, un burro. El padre quería ir a la feria a por uno nuevo pero el hijo le preguntaba “Padre, ¿Y si nos engañan y se nos muere?” Y ni fueron a la feria ni compraron el burro. Se apañaron a duras penas con su viejo pollino hasta que llegó la cosecha y, cuando más falta les hacía, la palmó. La labranza no requiere miserias. Debemos dedicar todos nuestros esfuerzos a conseguir incrementar los ingresos. Salgo a visitar a muchos empresarios a contarles estas reflexiones. Algunos están diseñando estrategias de crecimiento, pero no en España. Me dicen que el negocio aquí, ni está ni se le espera. Y ahí está el error, en sentarnos a esperar a que llegue.

Estrategias y Resultados ha nacido para ayudar a las empresas a vender mejor para vender más. Estamos predicando entre empresarios y emprendedores para hacerles ver que nadie puede reducir continuamente los costes y pretender crecer por ello. Debemos mejorar nuestros procesos comerciales e invertir en ellos igual que en otras ocasiones hemos invertido en mejorar la producción o la calidad. En un mundo con exceso de oferta debemos ser más hábiles que la competencia para introducir nuestros productos en el mercado. No cabe otra. Para convencer de que el cambio de rumbo es necesario hemos preparado una ponencia en CEIN “La Dirección Comercial de mi empresa” (http://www.navarrafactori.cein.es/?encuentro-con-empresarios-la-direccion-comercial-de-mi-empresa&Z=020df499fc65149b&date=07676fed0b900fad&IDevento=3fd4b8456b22920a ) y un Curso de Formación en AIN titulado “Construyendo la Dirección Comercial” ( http://www.ain.es/que_hacemos/plantilla.aspx?ms=3&s=11&h=1500&url=http://www.ain.es/formacion/FolletoN.asp?Accion=1%26Codigo=CM042 ) . Y sino lo hacemos, ¿Cuál es la alternativa?


Carlos Medrano Sola
Director de Estrategias y Resultados
estrategiasyresultados@gmail.com

martes, 26 de abril de 2011

Emprendedores y financiación

El ahorro y la inversión nacional ha ido al ladrillo. La vorágine especuladora pasada ha provocado un exceso de inversión a un sector (inflándolo hasta que ha explotado). El coste de oportunidad de invertir en ladrillo frente a hacerlo en mejorar la productividad traerá consecuencias negativas para el crecimiento. En la actualidad la poca financiación que tenemos está siendo absorvida por el estado principalmente. Como en las crisis anteriores, se ha producido un déficit público que ha hecho crecer la deuda a ritmo vertiginoso. Además, las políticas de estímulo de la demanda no han funcionado. La sustitución del gasto privado por el público sólo funciona en el corto plazo. Cuando se lo preguntaban a John Maynard Keynes, padre intelectual de estas políticas, contestaba diciendo “En el largo plazo estaremos todos muertos”. Efectivamente, así será pero no morirá la deuda contraída con las políticas expansivas, la pagarán nuestros hijos y nietos. Y ése es un legado que no me gustaría dejarles. Al final de su vida, Keynes pudo vislumbrar el peligro de excederse con las políticas que él mismo había propuesto, pero esta parte de su biografía no la recuerdan los que hoy abusan de su nombre para cometer atroces despilfarros. En nuestro caso el gobierno ha hecho bueno aquel viejo ejemplo del New Deal, por el cuál, en tiempos de desempleo, el estado debe contratar parados para que caven agujeros. Los parados cobrarán un sueldo que podrán usar para consumir y así impulsar la rueda varada de la economía deprimida. Y si la cosa se alarga, entonces, debían tapar los agujeros y cobrar de nuevo su paga. En nuestro caso, se ha gastado en aceras y proyectos superficiales por el estilo. Pero ésto ya es pasado, ahora la consecuencia es el déficit y la deuda. Agujero negro que absorve gran parte de la financiación disponible en el sistema. Y en el sector privado los grandes demandantes de financiación son la banca y el sector inmobiliario (luego hablaremos de los zombies). España tiene, históricamente, una balanza comercial negativa. Como no tenemos ahorro suficiente, tenemos que pagar este déficit endeudándonos con el exterior. Suma y sigue de necesidades de financiación.

“Demasiado grande para caer” Con este obsceno e injusto argumento nos han metido la mano en la cartera para financiar a los que han fracasado. Ésto si que es un “New Deal”. Con estas nuevas reglas de juego, los grandes banqueros tienen incentivos para arriesgarse más de lo debido en sus decisiones. Si les va bien ganarán y si les sale mal perderán su empleo, que es la parte negativa, pero se irán con millones de dólares en sus bolsillos, para consolarles. El accionista no perderá tampoco, si su banco es suficientemente grande, y recibirán las ayudas estatales necesarias para no perder su inversión. Los que lo han hecho mal deben caer para que dejen progresar a los que lo han hecho bien. Lo nuevo debe crecer de las cenizas de lo viejo. En el bosque la materia orgánica muerta sirve de abono para que crezcan los nuevos brotes verdes. Los trabajadores desempleados de las empresas caídas serán absorbidos por el nuevo cíclo. Los que no puedan entrar en la nueva ola deberán recibir la ayuda del estado para adaptarles a la nueva situación y que se puedan reenganchar en nuevas empresas.

Mantener empresas quebradas (públicas y privadas, entidades financieras o no financieras) es como mantener con vida a los zombies de las pelis de terror. No tiene ningún sentido y las consecuencias son graves. Como dicen en USA los “Walking Dead” los zombis (o no muertos según la literatura y películas de terror) son seres no vivos que pululan en busca de personas con las que saciar su infinita hambre de carne humana. Son gregarios, muy contagiosos y buscan ampliar su número. No razonan, no tiene sentido dialogar con ellos y son duros de eliminar. Suelen aparecer por una anomalía genética o nuclear y al principio, cuando la amenaza no parece grave, cuentan con valedores entre los vivos (especialmente entre sus creadores). ¿Quiénes son los zombis de la economía? En nuestro caso el virus que propaga la contaminación son las burbujas inmobiliarias, bursátiles o de deuda soberana o privada.

Japón sufrió una de las mayores burbujas especulativas de la historia económica moderna. El superávit comercial de los años 80 del pasado siglo se dirigió a la compra de suelo y acciones. La magnitud de la burbuja fue tal que el valor de los inmuebles de Japón era cinco veces el valor de todo el territorio completo de Estados Unidos. El índice Nikkei de la bolsa de Tokio se multiplicó por cuatro en cinco años. Tras el estallido de la burbuja, el Nikkei se depreció un 63% en dos ejercicios y los precios de los inmuebles cayeron en picado. Dado que las acciones tenían como garantía los bienes inmuebles, el sistema financiero entró en una grave crisis que sumió a la economía en un letargo que duró hasta 2007. Las empresas y entidades financieras estaban quebradas en la práctica pero se las mantuvo vivas artificialmente para evitar su caída masiva como piezas del dominó. Era zombis empresariales (empresas no muertas). En 17 años mantuvo su PIB en el mismo valor nominal, así como el mismo número de trabajadores ocupados. El ahorro del país fue a parar a financiar el sector público y a los zombis. Como consecuencia se dejó sin financiación a la inversión privada “sana”. Además, los impuestos se subieron en varias ocasiones. En la crisis económica de Japón (la década de los noventa del pasado siglo) los recursos económicos y la financiación se dirigieron a los peores riesgos: Sector Público, banca e inmobiliarias. En nuestra crisis los primeros zombies fueron las empresas inmobiliarias que contagiaron a los bancos y éstos a su vez a los estados. Por el medio cayeron infectadas empresas y trabajadores en paro. Cayó Grecia, cayó Irlanda,… ¿quién será el siguiente infectado por los zombis?

Como están muertos es imposible que renazcan por sí mismos, como una parte de nuestro sistema financiero. Sirva de ejemplo las cajas. Si se financian al 7,78% ¿a qué precio van a poner los préstamos a los pequeños empresarios para que puedan progresar sus negocios? Todo lo que sea inferior al 10% probablemente les dará pérdidas. En la práctica, no hay financiación, porque los zombies necesitan toda la sangre (dinero) que puedan conseguir para sobrevivir ellos, y no para financiar a nadie más. La estrategia del avestruz. Vamos a sobrevivir cueste lo que cueste a ver si escampa. Los no muertos usan todo su poder e influencia para conseguir su inyección de droga monetaria. Una y otra vez piden más droga. Usan sus trabajadores como los rehenes de un secuestro. “O me das mi chute o despido a mis cien mil empleados” podrían decir. Sólo caen las pequeñas empresas que son las que generan más del 80% del empleo en nuestro país, pero no olvidemos que el mayor devorador de financiación es el Estado. Con el déficit disparado y su deuda creciente, actúa como un enorme zombie que nos sustrae rentas vía aumento de impuestos primero y después por la no menos grave hambre de financiación que arrasa con miles de millones de euros que tampoco llegan al emprendedor. En esta situación, a nadie sorprende que la mayor dificultad que manifiestan los emprendedores es la falta de financiación. Ante esta disyuntiva ¿Qué podemos hacer? ¿Esperar a que escampe o emigrar?

El gobierno español ha tardado un par de años en reconocer la situación y otro más en empezar a hacer algo. Ahora estamos con reformas a medias, como la del mercado laboral, que hasta día de hoy no ha conseguido mejorar su principal objetivo, que era crear empleo. Tenemos que hacer mucho más. Por ejemplo comentaré unas cuantas ideas a vuela pluma: Quitar todas las subvenciones (Plan E, Planes Renove, la VPO, etc.). Privatizar los servicios públicos que se puedan dar por el sector privado y que el estado no compita en los mercados competitivos. Que los servicios públicos (que se determine) se subcontraten manteniendo los requisitos y derechos de los ciudadanos (si se hace vía concesiones, pudiera ser una fuente de ingresos indefinida). Privatizar empresas públicas. El estado debe garantizar los servicios públicos que quiera y necesite la sociedad. Pero que deba garantizarlos no implica necesariamente que los tenga que suministrar él mismo. Es decir, si necesito una ambulancia me sirve igual una de una empresa privada que una pública. Pero es mejor para el sistema que me dé la asistencia una ambulancia privada, porque es más eficiente que hacerlo desde el sector público. La administración debe sacar una concesión para que den el servicio las mejores empresas. Y si no cumplen adecuadamente, que se la quiten y se la den a otras.

Que todas las autopistas sean de peaje (que las pague quién las usa). Acabar con el “todo gratis”. Pagar, aunque sólo sea una cantidad testimonial (copago) en el uso de los servicios públicos (excluyendo del pago a los pobres). Ganaríamos en productividad (el sector privado es más eficiente) y además con los ingresos que recibiría el estado se podría reducir la deuda. Qué antipáticos son los recortes y los ajustes (qué mal genio tenemos cuando nos ponemos a dieta,...). Los gobernantes que se atrevan a realizar estas medidas, se arriesgan a salir mal en las próximas elecciones, pero habrán cumplido con su deber.

Con estos mimbres es complicado atraer capital hacia la inversión productiva. La que nos dará crecimiento y prósperidad en años venideros. La situación seguirá siendo muy grave mientras no se solucione el paro. Los millones de parados actuales tienen que darse cuenta de que los viejos tiempos tardarán en volver. Y que el trabajo por cuenta ajena no es seguro. Debemos cambiar de mentalidad. La seguridad en el empleo pudo funcionar para mis padres y mis abuelos, pero no ahora. Tenemos que buscar otros modelos de relaciones laborales mucho más dinámicas. Relaciones en las que tomen más importancia el autoempleo, el emprendimiento y en definitiva, tomemos la iniciativa de nuestra ocupación laboral futura. Como decía Abraham Lincoln “Aquellos que esperan que las cosas lleguen es posible que reciban alguna, pero sólo las que dejen los que salen a buscarlas”.


Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía y Emprendedor
http://economiapoliticaymas.blogspot.com

viernes, 15 de abril de 2011

Colonialismo a la inversa (publicado en el Diario)

China va a invertir en España comprando Deuda Pública y participará en la reestructuración de las cajas de ahorros. El gigante asiático es uno de los principales tenedores de deuda española ya que posee un 12,5% del total. La cuestión que me planteo, es si es tan buena noticia como para dedicarle la amplia sonrisa con la que adornó nuestro presidente el apretón de manos a su homologo chino.

Algo me hace pensar que los chinos no se conformarán con el pago de intereses. Este tipo de acuerdos tienen otras contraprestaciones que deberíamos conocer. Grecia, Irlanda y Portugal han quebrado. El siguiente de la lista somos nosotros. Ya no tenemos a nadie delante nuestro para entrar en el pozo de los caídos. Ciertamente no creo que España vaya a caer, no existe ahora mismo el riesgo que padecimos hace unos meses. En cualquier caso, los prestamistas no obvian que el riesgo, aunque menor, sigue ahí. Nuestra espada de Damocles son el paro y el débil crecimiento económico. Si China accede a financiarnos no creo que sea por el 2% de interés que le vamos a pagar. Si los bonos chinos cotizan por encima del 5%, ¿Dónde encuentra Wen Jiabao el interés en nuestro país? ¿Se conformarán con entrar en nuestro sistema financiero por una participación en las cajas o exigirán el control? Comprar una caja con problemas financieros no se concibe por la generosidad del pueblo chino. Y ¿Qué pasaría si China decide vender los bonos españoles, o amenaza con hacerlo? Tendríamos serios problemas. Su valor tendería a cero. En la práctica implicaría una intervención de la economía española porque nadie podría absorber tal cantidad de dinero. Ahora bien, este no es solamente un problema español. China es el mayor acreedor de deuda de los Estados Unidos. Tienen 900 mil millones de dólares en bonos del Tesoro americano. Además tienen una tesorería de 1,4 billones de dólares en efectivo provenientes de sus continuos y crecientes excedentes de la Balanza Comercial. China lleva años, vendiendo al mundo mucho más de lo que consume. Como consecuencia tiene las arcas repletas. Pero volviendo al hecho en sí de que sea el mayor acreedor del mundo de la economía estadounidense. ¿Cuáles serían las consecuencias de que China pusiera a la venta todo ese capital invertido en deuda americana? Probablemente sería una acción que provocaría la quiebra del imperio americano. Estaríamos asistiendo a la caída de otro imperio, el cuál, incapaz de poder financiar tal cantidad de deuda quebraría y tendría que sucumbir frente a su antagonista. ¿Quién manda en el mundo el poder militar americano o el dinero chino? La tibieza de Obama en su política exterior ¿estará condicionada por su dependencia financiera?

Con la caída de Lehman Brothers en septiembre de 2008 estalló la crisis financiera actual. Dejaron caer a Lehman pero no a otras entidades que estaban igualmente quebradas. El paraíso del liberalismo se convirtió, ante la perplejidad del mundo entero, en un nuevo modelo intervencionista que nacionalizaba bancos y aseguradoras. Hay quienes afirman que las nacionalizaciones de empresas (Fanie Mae, Banc of America, etc.) fue una estrategia para evitar que cayeran en manos de los inversores Árabes y Chinos. Pero a la postre, estas maniobras no consiguieron eludir la dependencia financiera de dichos socios (poco deseados). Negándoles copar el corazón financiero americano les ofrecieron en bandeja la sumisión económica de todo el Estado. Los países colonizados se levantan triunfantes contra sus antiguos dominadores.

A nuestro país siempre le quedará Europa. Y más singularmente Alemania. Ángela Merkel nos ha leído la lección, bien clarita. Nos exige productividad y recortes para seguir financiándonos. La primera ligada a los salarios. Si los salarios suben más que la productividad provocan inflación y todos seremos más pobres. Y respecto a los recortes: ¿cómo va a explicar a sus conciudadanos que va a financiar a los españoles, que trabajan poco más allá de los 60 años, mientras exige a los suyos jubilarse a los 67?.


Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía
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martes, 12 de abril de 2011

Crecimiento Económico y Emprendedores V. Emprendimiento, Innovación y Ciclos

“La verdadera innovación es rompedora de lo anterior”, como decía J. A. Schumpeter: Las innovaciones son cambios históricos e irreversibles en la manera de hacer las cosas. Es la lucha de lo nuevo contra lo viejo. Para que nazcan nuevos árboles en el bosque deben morir los enfermos y viejos. Si ésto no fuera así, el bosque no podría regenerarse. Este razonamiento se conoce como la teoría de “La Destrucción Creativa”. Tiene algo de Darwiniano, como decía el célebre sabio inglés “las especies que sobreviven a la selección natural no son las más fuertes o las más resistentes. El éxito lo obtienen las que más y mejor se adaptan a los cambios”. Y ahora recuerdo a Carlo M. Cipolla “La innovación es para la sociedad lo que la mutación es en biología. No todas las mutaciones son buenas. Algunas son sólo experimentos pobres y desafortunados. Sólo la selección natural (que no es racional, aún cuando pueda ser explicada racionalmente ex post) nos dirá al cabo del tiempo qué mutaciones son buenas y cuáles son malas.” El progreso del sistema capitalista reside en su capacidad de regeneración. Las expansiones vienen siempre seguidas de su correspondiente crisis. En un bucle sin solución de continuidad. Con la importante característica de que a largo plazo la tendencia principal de progreso económico es creciente.

La ventaja del pionero es temporal. Poco a poco la innovación se va asimilando y se masifica. Como también surgen en masa las empresas que la adoptan. Ésto provoca la saturación del mercado, la caída de precios y por último la depresión. “El proceso de destrucción creadora constituye el dato de hecho esencial del capitalismo. En ella consiste en definitiva el capitalismo y toda empresa capitalista tiene que amoldarse a ella para vivir. La construcción de nuevas empresas exitosas regeneran el sistema productivo y propician los nuevos ciclos productivos. Los ciclos son la forma en que progresa la sociedad capitalista. Las innovaciones, aquí referidas, no son infinitesimales sino que son rompedoras con el status quo previo. Son cambios históricos e irreversibles en la manera de hacer las cosas.

El capitalismo es un sistema en evolución. Sucesiones de crisis y expansiones económicas. La hoja de la sierra (como el pelo de Burt Simpson) que a largo plazo siempre crece. Es un sistema discontinuo con retrocesos e interrupciones. El capitalismo crece a saltos. En una crisis se destruye gran cantidad de valores. La depresión es la reacción del sistema económico frente al auge anterior. Después de la crisis, el sistema económico necesita reagruparse antes de emprender el nuevo crecimiento que sobrepasará el punto álgido anterior. Schumpeter considera que los empresarios aparecen en grupo y no continuamente de manera individual.

Los nuevos emprendedores surgen en periodos difíciles. Son unos pocos los que poseen esas cualidades de dirección. Pero a medida que algunos pioneros avanzan, otros empresarios van incorporándose a la nueva tecnología. Como en la conquista del oeste, los pioneros ocupan primero las tierras más fértiles. Conforme van llegando nuevos colonos van adquiriendo nuevas parcelas, lógicamente, peores que las anteriores. Y al final los últimos en llegar tienen que arreglárselas con los restos. Montes, eriales y tierras inundables.

En la realidad empresarial la nueva tecnología se va haciendo cada vez más “familiar”. El incremento de la oferta va reduciendo los precios. Y éstos van disminuyendo los beneficios, los cuáles tienden a cero. La aparición de nuevos empresarios en masa hace que los productos inunden los mercados masivamente con la consiguiente disminución drástica de los precios. Los beneficios desaparecen y llegan las pérdidas. Las cuáles a su vez conducen a la crisis y la depresión. Es un volver a empezar constante.


Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía y Emprendedor
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domingo, 3 de abril de 2011

Emprendedores y Crecimiento Económico IV. Motivación Emprendedora y Crisis Económica

En estos años de recesión económica no se dan las mejores circunstancias para lanzarse a una nueva actividad emprendedora. Los trabajadores más valiosos (en el sentido de más demandados) se acurrucan al abrigo de la nómina. La cuál es un potente anestésico para el espíritu emprendedor. Los que tienen ideas se las guardan para tiempos mejores. Y los que hacían negocios en las aguas termales de los años de expansión, ni saben ni quieren lanzarse a la piscina de agua helada, bastante tienen con pagar las deudas de los proyectos fallidos. Hace unos días, le presenté un nuevo proyecto a mi amigo y asesor Juancho, y él me contestó “Carlos, hace mucho frío, ¿lo sabes?”. Lo peor es que tiene razón.

Buscamos la seguridad en el empleo frente a la liberad. O en otro nivel superior la búsqueda de la felicidad. Pero ¿Qué seguridad han tenido todos los que han sufrido un ERE? Hasta los funcionarios (los intocables) han visto reducido su salario. Cuando alguien consigue una plaza de funcionario lo celebra como el día más grande de su vida profesional. Acude a su primer día de trabajo dando saltos de alegría y con resaca de la juerga que preparó con sus amigos para celebrarlo. Pero el viejo funcionario, que lleva más de cuarenta años allí, lo mira con desdén. La clave del éxito en cualquier ámbito de la vida es disfrutar con lo que se hace. Si las horas se te hacen minutos lograrás alcanzar la excelencia. Busca la felicidad y tendrás éxito.

Para que haya motivación debemos partir de la necesidad, del descontento, de la insatisfacción, de la ambición por mejorar, del deseo de conseguir nuestro sueño. Nuestra sociedad opulenta no favorece que tengamos ganas de comernos el mundo. El estado paternalista no ayuda. Buscamos ponernos a cobijo de su paraguas. Una adormidera que aplaca nuestra ansiedad y miedo al futuro, a la vez que nos vamos aturdiendo al calor de su regazo. Si nos dijeran claramente que hay una gran probabilidad de que no va a haber pensiones suficientes ni seguridad social para todos, quizás así, despertaríamos de nuestro letargo y nos pondríamos manos a la obra. Buscaríamos generar rentas futuras para pagar la universidad de los hijos o para proveernos de ingresos en la vejez, etc.

En marzo de 2010 el Círculo de Empresarios publicó “Prioridad: Más empresarios”. En este documento defendía que eran necesarios medio millón de empresarios para superar la crisis económica. Desde 1987 hasta 2007 la economía española ha registrado dos fases de crecimiento económico (separadas por la crisis de los primeros años 90). El número de trabajadores pasó, en dicho periodo, de once millones a superar los 20. A su vez se produjo un incremento paralelo del porcentaje que representa el total de empleadores sobre la población ocupada (del 3,5% al 6%). Entre 1996 con una tasa de desempleo del 22% y 2007 con el 8%, se crearon cerca de 8 millones de empleos, de los que medio millón correspondieron a empleadores. El Círculo de Empresarios pedía una serie de reformas que facilitasen el cambio: Seguridad Jurídica, facilidad para tramitar el alta de nuevas empresas, tratamiento fiscal favorable, mercados regulados que garanticen la justa competencia, reforma laboral, control del déficit de las AAPP, impulsar el capital riesgo y como último punto, pero no menos importante, promover el espíritu emprendedor. Las fórmulas propuestas para inspirar hacia el emprendimiento se basan en introducir en los currículos académicos contenidos y habilidades emprendedoras, explicar el papel del empresario como creador de riqueza, fortalecer los vínculos entre la empresa y el mundo académico, fomentar la ética empresarial y educar al profesorado

La relación padres e hijos ha cambiado en las últimas décadas. Se produce un retraso en la edad de emancipación. Nuestros jóvenes duermen entre las sábanas de su habitación infantil hasta mucho más allá de los treinta años. Para salir del nido esperan la oportunidad para empezar a volar, porque nadie les ha dicho que a volar se aprende volando. No pasa nada si se caen, lo importante es que se vuelvan a levantar. Cuando nacieron tenían la ambición de caminar sobre sus dos piernas. Cuántas veces tropezaron y se hicieron daño al dar sus primeros pasos. En el hombre está la esencia de su superación personal. El bebé volverá a caerse y a levantarse cuantas veces hagan falta hasta que ande por sí solo. Los padres no deben alarmarse y chillar cuando se tropiezan pues asustarán a su vástago y éste se acobardará. Deben evitar que se rompa la cabeza, pero ésto raras veces ocurre. Hay casos enfermizos en los que los niños tardan años en andar. El exceso de proteccionismo de los padres consigue anquilosarles y retrasar su desarrollo. Así pues, debemos animar a nuestros jóvenes a que vayan aprendiendo a volar. Si se hacen mucho daño ya les socorreremos. Las gallinas acogen bajo sus alas a sus pollitos. De esos pollitos sólo saldrán más gallinas porque ésa es su naturaleza. Su futuro será formar parte de un asado o una sopa. La crisis actual ha acentuado esta tendencia aniñadora (me invento la palabra) de nuestro preparados jóvenes. Necesitamos un nuevo modelo a seguir, nuevos personajes a los que admirar.

Thomas Alva Edison (1847-1931) no inventó la bombilla. Otros lo hicieron antes que él. Él la perfeccionó para que tuviera valor comercial. Consiguió, después de miles de ensayos fracasados, que funcionara más tiempo. Dejó pronto de estudiar, porque sus maestros pensaban que no era suficientemente inteligente. A pesar de ello, su madre logró despertar al genio construyéndole un laboratorio en el sótano de su casa. De niño vendió dulces, periódicos, revistas, escribió y editó su propio periódico empleando a otros niños para distribuirlo. Dedicaba su tiempo libre a investigar. Fue operador de telégrafo y pudo conocer en profundidad el sistema de líneas, postes, gente con aptitudes y estaciones de transmisión de esta nueva tecnología. Esta experiencia le sirvió para comprender que el poder de la bombilla no solo era ésta como tal, sino que englobaba también el sistema de líneas eléctricas y estaciones de transmisión que la impulsaban. Construyó una red y se hizo inmensamente rico. Fundó, entre otras empresas, General Electric y su sentido de los negocios logró que sus inventos fueran útiles para millones de personas. Tenemos que recuperar figuras como él, buscar nuestros “Edison forales y nacionales” que los hay, y que sirvan de modelo para las nuevas generaciones.

En nuestro país ser investigador en un laboratorio es muy fashion pero es necesario un emprendedor que lo convierta en un producto y lo comercialice. Los esfuerzos por innovar (dejando a parte la necesaria investigación pura) son inútiles si no tienen, desde el planteamiento inicial, llegar al mercado.

En los medios de comunicación suelen salir políticos analizando que si Navarra invierte en I+D+i el 1.96%, que si Japón invierte el 3.44%, y que si EE.UU el 2.7%. O frases grandilocuentes como “En el año 2015 estaremos en la Champions League de las naciones que más invierten en I+D+I”. ¡Qué más dará la cantidad de lo que se gasta en I+D+i lo importante es el retorno de la inversión! Como dice Xavier Sala i Martín a la I+D+I solo le falta la O, la T y la A. La innovación no es más sencilla para las empresas. Que Microsoft se gaste ocho veces más que Apple en innovar no ha impedido que la compañía de la manzana le haya adelantado en valoración bursátil. El éxito de Apple ha residido en la capacidad de crear una comunidad de fans alrededor de los productos más rompedores del mercado. Se centran en unos pocos productos (con dos móviles y la ayuda del Android de Google, casi quiebran a Nokia, líder del mercado venido a menos). Frente a eso Microsoft ha abusado de su posición dominante sacando productos nuevos cuando dejaban de venderse los viejos.

Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía y Emprendedor
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domingo, 27 de marzo de 2011

Emprendedores y Crecimiento Económico III. Liderando el Crecimiento Económico

¿Quién lidera el crecimiento económico? Las empresas y los trabajadores. Y más en concreto, el emprendedor. El premio Nobel de Economía J. A. Schumpeter colocó al emprendedor en el centro del proceso económico. Es el individuo que lleva a cabo las innovaciones que provocan el progreso de la sociedad capitalista. El emprendedor no tiene por qué ser el inventor de una mercancía o el introductor de algún proceso ni el que aporta el capital (Edison no inventó la bombilla). El aspecto diferenciador único del emprendedor es el Liderazgo y no la propiedad de los medios productivos o el capital.

Pocos quieren ser emprendedores. La inmensa mayoría de los jovenes (y de la sociedad en general) prefiere ser funcionario o trabajar para una gran empresa. Los pocos que se deciden por el emprendimiento lo hacen básicamente por dos motivos: emprenden por necesidad o por oportunidad. Los primeros son los que tratan de conseguir un trabajo por cuenta ajena, pero por distintos motivos no lo encuentran o lo que hayan no es de su agrado. Es lo que se conoce vulgarmente por autoempleo. Los segundos detectan oportunidades de negocio, bien sea por heredar una empresa familiar, por encontrar un nuevo nicho de mercado en auge, por vocación,... o sencillamente quieren enriquecerse. Ésta última motivación suele estar mal vista en nuestra sociedad. El emprendedor, en cuanto que se queda con el beneficio de su empresa, tiene el estigma de “ilegitimo aprovechado”. La consideración de usufructo no merecido se le aplica desde que lo denunciara Karl Marx con su célebre “alienación del trabajador”, el cuál se frustraba al ser hurtado del fruto de su esfuerzo productivo. La parte que le falta a la reflexión anterior es que en caso de pérdidas el emprendedor responde de ellas en primera persona. Y que si cobra beneficios es porque se arriesga para conseguirlos. Como decía Adam Smith “No hemos de esperar a que nuestra comida provenga de la benevolencia del carnicero, ni del cervecero, ni del panadero, sino de su propio interés”. El panadero trabaja para que tengamos el pan de cada día, a tiempo y de calidad. Porque si no lo hace así nos iremos a la panadería de enfrente y aquél tendrá que cerrar. Como conclusión tendremos pan de calidad a un precio adecuado.

Lógicamente el interés propio, el egoísmo que mueve al empresario capitalista tiene un límite. Funciona hasta cierto punto. “El mundo tiene suficientes recursos para colmar las necesidades de toda la especie humana,… pero insuficiente para colmar la codicia de un solo hombre”. Sabias palabras de Ghandi que me hacen recordar a uno de los antihéroes capitalistas más famosos del cine. Gordon Gekko (Michael Douglas en Wall Street I) y su famoso discurso “Greed is good” (la codicia es buena) http://www.youtube.com/watch?v=84th6YwtA0w. Paradigma de mentiroso, manipulador de mercados, beneficiario de información privilegiada y carroñero despiadado. En el mundo, por desgracia, también existen tipos como éste. La realidad supera la ficción. “Así como existe un mínimo de necesidades humanas por debajo del cuál la vida resulta imposible, no existe prácticamente ningún límite superior para los deseos humanos” Carlo M. Cipolla. No obstante, no podemos condenar un sistema porque existan miembros indeseables que lo usen para hacer el mal. Debemos protegernos de los que se aprovechan de las debilidades del sistema para satisfacer sus más bajos instintos. Un sistema judicial que protega la propiedad privada y que castigue duramente a estos ladrones de guante blanco. Por desgracia, suelen tener los mejores abogados. Al librarse algunos de purgar por sus abusos, dan razones a los que no creen en el sistema para criticarlo, y tienen razón.

En nuestra sociedad existe un cierto recelo a la figura del empresario. Así como se reconoce su importante papel en la creación de empleo, riqueza y bienestar, también se le critica por su afán de lucro, supuestamente a costa de los trabajadores. La empresa está constituida por el empresario y los trabajadores. Y el futuro de aquella afectará tanto al uno como a los otros. Debemos superar las viejas reminiscencias de la lucha de clases marxista.
El paro juvenil es bestial, los jóvenes están de sobra formados y la vertiginosa evolución de las nuevas tecnologías hace pensar que, en ese caldo de cultivo, surgirán nuevos proyectos. Pero no es así. De hecho, Alfons Cornellá, consultor y conferenciante, afirma que "la emprendeduría resulta ser más una vocación de personas maduras que de los jóvenes". ¿Qué les falta a nuestros jóvenes?¿De verdad no pueden encontrar nada en lo que luchar con pasión por su proyecto? Quizás no sean ellos los culpables. Necesitan la Idea, Asesoramiento, Financiación, y Motivación. La Idea: no es necesario inventar nada nuevo. Hay que mejorar lo preexistente, que sea útil y mejore cualquier necesidad actual. Asesoramiento: lideradas por la Cámara de Comercio, CEIN y CEN, Navarra cuenta con una veintena de asociaciones e instituciones de ayuda a los emprendedores. Dan formación gratuita específica y asesoran sobre el Plan de Negocio, la financiación, las subvenciones, prácticamente cualquier duda que surja. Financiación: para la inversión están las tres Efes Family, Friends and Fools (Familia, Amigos y Locos, en inglés). Además de las vías tradicionales hay que buscar avalistas, Business Angels (Asociaciones de Inversores para nuevos proyectos) y empresas de Capital Riesgo. Y buscar la rentabilidad reduciendo al máximo todos los gastos fijos. No se compra nada, hay que alquilar todo lo necesario. Motivación: ¿Por qué? Respuesta a la gallega ¿Por qué no? ¿Qué tienen que perder? En el peor de los casos ganarán la experiencia. Obviamente no es tan fácil, de hecho es muy complicado, pero no seré yo quien les diga las pegas. Para eso están todos los que, en su entorno, les intentarán convencer para que no den el paso. Keneth Paul Morse (fundador del Centro de Emprendedores del MIT Masachusetts Institute of Technology) afirmaba en una visita a Barcelona: "Si no encuentra trabajo, créelo usted mismo. En los próximos cinco años la mayoría del empleo vendrá de las start-up (empresas de nueva creación)". Y daba algún consejo. "Ser ambicioso, no tener miedo al fracaso porque es la madre del éxito, construir un equipo y pensar ¡Podemos hacerlo¡" Suena muy americano, en el mal sentido de la palabra. Quizás debiéramos tomar ejemplo de su capacidad de emprender, innovar y liderar la economía mundial. Sus jóvenes universitarios quieren ser como Bill Gates (Microsoft), Steve Jobs (Apple) o el joven Mark Zuckerberg (Facebook). Me conformaría con copiar que nuestros universitarios también tuvieran en la cabeza emular a éstos u otros líderes por su capacidad para desarrollar nuevas empresas. Casualmente ninguno de los mencionados creadores llegó a terminar los estudios universitarios. Quizás no sean tan buen ejemplo, ¿o sí?
¿Cuándo empezamos a fomentar el espíritu emprendedor? En la universidad ya es tarde, hay que empezar desde niños. Sin atosigar a la chavalería. Porque da para otro artículo la presión que reciben algunos niños para dominar las asignaturas tradicionales más las extraescolares, más las actividades de moda (como aprender Chino). En una ocasión le preguntaron a Igor Stravinsky si era bueno estimular con música clásica a los niños en el vientre materno para que fueran melómanos de adultos. Él respondió que es mejor ponerle la música a la madre. Si ésta disfruta, ya se lo enseñará a su hijo. Así pues, debemos empezar concienciando a los padres para que éstos alienten a sus retoños. Podríamos empezar con poesía inspiradora. En mi despacho tengo siempre dos poemas que me acompañan e inspiran, “Ítaca” de Kavafis y “No te detengas” de Walt Whitman (ver Anexo 1). Por ahora se los voy leyendo a mis hijos. Me gustaría que fueran captando la esencia.

Hemos visto cómo la iniciativa del día del emprendedor ha caído en picado por la falta de financiación pública. Los famosos recortes han afectado a una iniciativa popular que festejaba el día de los que daban un paso adelante. Los que querían ser tractor y arrastrar a otros a conseguir prosperidad. Los que decidían levantarse antes que nadie por la mañana e ir a crear nuevas oportunidades. En Navarra han surgido interesantes iniciativas como NASF, Iniciador Navarra o el Plan Moderna para inversores y emprendedores. La sociedad civil está despertando del letargo de provocado por la opulencia de los felices años pasados. Debemos impulsarlos entre todos hasta que abramos los ojos a los infelices que miran al Estado para que les solucione sus problemas.


Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía y Emprendedor
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domingo, 20 de marzo de 2011

A vueltas con el Decrecimiento (Publicado en el Diario)

Me dispongo a contra argumentar algunas críticas a mi artículo sobre el Decrecimiento Económico, expuestas por mi exprofesor de Historia de la Economía D. Alejandro Arizkun Cela. Afirmaba que “el incremento de la productividad se ha apoyado en aumentos espectaculares de la energía utilizada” La productividad se ha visto favorecida por energía abundante y barata, pero si el crecimiento dependiera exclusivamente de este factor, países como Rusia, Venezuela o los Árabes serían el mayor exponente de crecimiento mundial. La economía crece, básicamente, por tres efectos: Porque los trabajadores tienen más capital (máquinas, instrumentos, etc.) con los que trabajar. En segundo lugar porque tienen una mayor formación que los hace más productivos. Y el tercer elemento es el progreso tecnológico (Bill Gates y compañía). No soy ajeno a la preocupación por la contaminación de nuestro planeta. Los fracasos del mercado deben ser corregidos por el Estado. La polución es uno de ellos. Como las ganancias de contaminar se las queda el empresario y la contaminación nos la repartimos entre todos, hay demasiados incentivos para contaminar. Las fábricas que contaminan deben ser desincentivadas mediante impuestos para que abandonen la tecnología antigua. El gravamen debe compensar el mal hecho y además debe alentar al empresario a cambiar la tecnología contaminante por otra limpia.
En mi anterior artículo no dije que quisiera que mis hijos fueran ricos (cosa que no me importaría). Lo que afirmaba es que, con las políticas de decrecimiento es seguro que ellos y mis nietos serán pobres. Y claro, los pobres no tienen la libertad de elegir qué quieren hacer con sus vidas. Bastante tienen con sobrevivir. Los pobres carecen de libertad de elección.
En Azagra, mi pueblo, estarían encantados de que se prohibiera la circulación de tomates (por cierto, son una maravilla). De esa forma tendrían, junto con otros pueblos productores, el monopolio de la venta de tan preciado manjar. La pega la tendrían los consumidores, pues el descenso de competencia en el mercado de tomates provocaría una subida, inmediata, de los precios del encarnado manjar. Si el transporte de tomates contamina, que le pongan un impuesto al emponzoñador. Si los tomateros viven protegidos por el estado, el cuál frena la competencia, no tendrán incentivos para cambiar nada, y serán más ineficientes que si tienen competencia. Además, cerrar el primer mundo a los tomates del tercer mundo (u otras mercancías sencillas como la textil) hace que los condenemos a la miseria. Si les contamos a los tomateros africanos las teorías del decrecimiento nos dirán que vayamos a predicar al desierto del Sahara. En los años sesenta hablar de pobreza era sinónimo de hablar de Asia. La introducción de economías de mercado y la iniciativa privada en países como China, India, Corea del Sur, Tailandia, Malasia, etc. ha provocado uno de los mayores progresos económicos y sociales de la humanidad. Solo en China más de 400 millones de personas han superado el umbral de pobreza durante este periodo.
Sobre las diferencias de renta: tengo que decirle que no soy envidioso de los bienes de mis vecinos. Cuanto más tengan, mejor para ellos.
Aboga por la felicidad de tener más tiempo libre o incluso dedicarse a no hacer nada. “Dolce far niente”, dicen los italianos. Podemos traducirlo como “dulce ociosidad”. Esta bella frase italiana se torna extremadamente amarga para los parados que necesitan que nuestra economía crezca por encima del 3% para que se genere empleo. Porque ya me dirá cómo va a solucionar el paro la teoría del decrecimiento. ¿Qué salida les queda?, ¿Emigrar? Desde el confort que da una plaza de funcionario es fácil caer en la tentación de filosofar sobre un sistema, como el decrecimiento económico, que no se ha implantado en ningún país civilizado.
Me ha gustado la cita del economista británico Kenneth Boulding, yo aporto otra de D. Xavier Sala i Martín, catedrático de Economía de la Universidad de Columbia “Averiguar qué es lo que permite que un país crezca, salga de la pobreza y sea rico es la cuestión más importante del mundo, porque afecta a las vidas y bienestar de miles de millones de seres humanos”.

Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía
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viernes, 18 de marzo de 2011

Emprendedores y Crecimiento Económico II. Educación

“La educación es la fabricación de ecos controlada por el Estado” Norman Douglas.

Me encanta la historia. Ahora bien, no me he aburrido más en mi vida que en las clases de historia del instituto. Eran horribles. Durante 55 minutos escuchabamos la voz ténue y débil de Doña Inés. Asomaba su diminuta cabeza sentada en la silla de su mesa o directamente sobre ésta (los días que quería innovar). Con la chaqueta sobre los hombros, dictaba de carrerilla la lección del día. Consegui aprobar por los pelos y me gané varias reprimendas suyas, y con razón, porque era incapaz de estar quieto. No quiero centrarme en mi querida Doña Inés porque no era la única, ni era culpa suya, un sistema creado hace cientos de años por el imperio Prusiano.

A mi admirado Adam Smith no le gustaba nada los “profesores públicos”. Éstos eran los que cobraban su sueldo independientemente del número de alumnos que acudían a sus clases o del entusiasmo que provocaran en el alumnado. Estos profesores al estar desprovistos de cualquier incentivo se esforzaban y trabajaban poco. El propio Smith fue remunerado por el número de alumnos que acudían a sus clases cuando era profesor en Glasgow. En algunas Escuelas de Negocios los alumnos examinan al profesor. Si éste obtiene una mala calificacción, es sometido a un programa de entrenamiento intensivo o es despedido. La enseñanza es demasiado importante y debe ser liderada por los mejores.

Invertimos menos que otros países de nuestro entorno (4,3% frente al 5,3% de media de la UE) y tenemos una enseñanza de menor calidad. Competir con China o India se va a hacer cada vez más difícil, ya que estos países están mejorando a marchas forzadas su sistema educativo. No sólo competirán en salarios bajos, sino que también lo harán en tecnología mejor que nosotros. España es uno de los países de la UE con mayor tasa de fracaso escolar (un 31% de los estudiantes abandonan la educación secundaria post obligatoria frente al 15% de la UE). Nuestro sistema educativo es igualitarista en la mediocridad. No se busca la excelencia porque no existe incentivos adecuados para ello. Los niños y jóvenes no tienen caminos para desarrollar su máximo potencial. Se les mide por su inteligencia verbolingüistica. Los niños que tienen otro tipo de inteligencia son relegados y salen de la escuela creyendo que son tontos. Pero obtener las mejores notas no garantiza el éxito en la vida “real”. Como tampoco es cierto que el mal estudiante vaya a ser un fracasado de adulto. Es la constación de que hay que cambiar el sistema. Partiendo de un mínimo común denominador de educación básica, a los estudiantes hay que facilitarles que estudien lo que les interesa. Ésa es la clave para que tengan éxito y alcancen la excelencia.

Se evidencia en el informe PISA que tenemos una distribución bimodal del rendimiento académico, donde los buenos estudiantes son mejores que las generaciones previas pero los malos estudiantes son mucho peores. Según el profesor Juan José Dolado, profesor de Economía de la Universidad Carlos III de Madrid: “Nos olvidamos de temas de mayor calado como son (i) la recuperación de la cultura del esfuerzo mediante incentivos adecuados, (ii) la existencia de los controles centralizados (sería muy conveniente recuperar la antigua reválida a los 14 años abolida en 1970), (iii) la insuficiente oferta de “pasarelas” de acceso a la formación profesional al acabar la primaria (la ratio de alumnos en FP y universidad es 1:2.5 en España, frente a 1:1 en la UE), (iv) el reforzamiento del aprendizaje de los idiomas extranjeros (todavía un 55% de la población española no habla ninguno), (v) la financiación generosa de grupos de apoyo para los alumnos desaventajados, (vi) el uso de tecnologías modernas en la transmisión de conocimiento (solo en el 8% del tiempo en clase se utilizan las TICs, aunque se espera mejore con el nuevo plan escuela 2.0), en combinación con el necesario esfuerzo memorístico y el trabajo en casa, y (vii) el reforzamiento de la figura del profesor mediante su formación y reciclaje continuo. En definitiva, se trata de enfatizar el mensaje inequívoco de que la educación no es algo lúdico sino costoso. Éstas son las recetas del éxito en países como Corea o Finlandia, los líderes de PISA. Se trata de extender a la educación pública lo que ya ofrece la privada y concertada, para que compitan en igualdad de oportunidades, eliminando la baja movilidad social que impera en el sistema actual donde la renta familiar (p. ej., la disponibilidad de libros en el hogar) es un indicador preciso de la elección de tipo de colegio.” Un estudiante universitario tiene un coste medio de 7.700 € en una universidad pública y paga una matrícula media de unos 1.000 €. Es decir, que recibe un subsidio anual del contribuyente de 6.700 €. España destina a becas el 0.08% del PIB mientras que la UE destina el 0.25%. El sistema anglosajon se basa en matrículas caras combinado con becas para igualar en oportunidades a las clases menos favorecidas. En España es café para todos. El fracaso escolar es muy elevado. Un 30% abandona la universidad a los dos años sin título alguno. Sólo el 30% acaban una licenciatura en los cuatro años reglados. Además de ser malos datos en sí mismos, suponen un despilfarro de dinero público. Según el profesor Juan José Dolado “Con un flujo de entrada anual de 220 mil alumnos en la universidad pública y un stock de 1,22 millones en 2008, ello implica un desperdicio anual de algo mas de 2.790 millones de euros al año, casi el 0.26% del PIB. Si a este coste añadimos otros 2.050 millones de euros (0.19 % del PIB) procedentes del otro 30% de abandono escolar en la ESO (cuyo gasto anual por alumno en el sistema público es de € 4.500) y que un 35% de este colectivo acaba dicha etapa educativa en 5 años y no en la duración habitual de 4 años, la pérdida anual agregada se eleva a 5.562 millones de euros, es decir, cada año puede llegar a desperdiciarse algo mas de medio punto porcentual del PIB a consecuencia de la ineficiencia del sistema educativo público en nuestro país (un 12% del 4.3% del PIB que se gasta en educación).” Y sus propuestas “La necesaria reforma de nuestra universidad requiere la implantación urgente de un conjunto de medidas , entre las que destacaría las siguientes: (i) una mayor libertad por parte de las universidades públicas en la fijación de tasas ordinarias de matrícula y en la penalización del coste de las tasas extraordinarias para los alumnos repetidores; (ii) una mayor flexibilidad en la duración de los grados (como ocurre con las licenciaturas, donde, durante bastante tiempo, han venido coexistiendo las de 4 y 5 años); (iii) un sistema salarial mucho mas flexible dentro de los límites presupuestarios (con fondos públicos y privados) de cada institución evitando la excesiva uniformidad por categoría profesional (TU y CU) que rige en el modelo funcionarial existente. ; (iv) una financiación pública que de mucho más peso a la calidad y no tanto a la cantidad mediante la evaluación periódica de los departamentos universitarios en cada disciplina (tipo Research Assessment Exercise en RU); (v) un estatuto de la carrera profesional del personal académico (PDI) que fomente la movilidad y el control de calidad del mismo (con amplios períodos de prueba o tenure track), evitando la endogamia existente y los desincentivos derivados de la funcionarización masiva y prematura de una significativa proporción de sus integrantes; (vi) la apertura de nuestro sistema universitario a investigadores procedentes de otros países (sólo el 0.5% de nuestros profesores universitarios son extranjeros frente al 30% en EEUU y el 25% en RU); y (vii) una potenciación de la financiación y reconocimiento social de la FP superior como vía de acceso mucho mas eficiente al mercado laboral para muchos alumnos que fracasan en la universidad. La reciente reforma de la educación superior en Finlandia (la medalla de oro en PISA) que elimina la condición de funcionarios a PDIs retroactivamente a partir de enero de 2010, reduce el número de universidades mediante fusiones entre las ahora existentes y cambia radicalmente el sistema de gobernanza de las universidades públicas puede suponer un buen benchmark para la necesaria reforma de nuestro sistema universitario. Se argumentará que una reforma de este calado no es posible en nuestro entorno pero cabe recordar que hace dos décadas se eliminó la naturaleza funcionarial de los médicos de la Seguridad Social, pasando a tener contratos laborales ordinarios, y no parece que el sistema público de salud se haya resentido un ápice”

Nuestro sistema educativo proviene de Prusia. El propósito del sistema prusiano era crear soldados y empleados. Los primeros para extender y mantener el imperio. Los segundos para incorporarse a las fábricas como mano de obra. Así pues, los que primaba era hacer moldes iguales fáciles de gestionar en gran número. No quiero que se me malinterprete, no hago una crítica a ser soldado o empleado. Toda sociedad necesita soldados y empleados. Lo que cuestiono es el sistema educativo que nos hace salir a todos fabricados por el mismo patrón, en busca de un empleo y reaccionando como buenos soldaditos. Nos encontramos en la era de la información. Debemos ambicionar algo más que tener las aptitudes y actitudes que buscan los empleadores. Cuando salí de la universidad comprendí el viejo adagio cartesiano “solo sé que no se nada” y que la educación continuaría mucho tiempo después de abandonar las clases.


Carlos Medrano Sola es Licenciado en Economía y Emprendedor
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