viernes, 24 de septiembre de 2010

Más impuestos (publicado en Diario de Navarra el 24 de septiembre de 2010)

La Ministra de Economía Doña Elena Salgado nos ha anunciado lo subida del IRPF a las rentas superiores a 120.000 ó 130.000 €. Esta subida se sumaría a las ya anunciadas en Cataluña, Andalucía, Baleares, Extremadura, Asturias y Cantabria, cuyas personas “ricas” podrían llegar a tocar el 50% de impuesto sobre la renta. En España son unos 100.000 individuos. Se estima que esta medida reducirá el déficit público un 0.013% del PIB. Según los expertos en fiscalidad supondría una recaudación de unos 140 millones de euros. El Plan E fueron 14.000 millones de euros. Con la nueva recaudación teórica llegaría para el 1% del famoso plan. Me resulta tedioso repetir tantas veces que una subida de la tasa impositiva no tiene por qué conllevar una mayor recaudación. Es más, muchas veces, es menor porque se incentiva buscar nuevas formas para eludir el impuesto de forma legal o ilegal.

Recientemente hemos visto una subida de impuestos a las SICAV en el País Vasco desde el 1% que pagan en todo el Estado hasta el 28%. Las SICAV son instituciones de inversión colectiva que adoptan la forma de Sociedad Anónima y que tienen por objetivo la captación de fondos de los accionistas. Éstos invierten en la sociedad para que les gestione sus fondos y conseguir el mayor rendimiento posible. Son inversores con un nivel de activos elevado. La reacción ha sido inmediata y más del 70% de las SICAV han volado hacia otras regiones más propicias. El 30% que queda no tardará mucho en desaparecer también. El gobierno Vasco no sólo no ha reconocido el error garrafal sino que además ha pedido al Gobierno Central que extienda al resto de España la misma medida contra las SICAV. Es obvio que, si le hacen caso, veremos repetir la misma reacción pero esta vez a escala internacional. Julio Segura, Presidente de la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), ha advertido del peligro de deslocalización y fuga de capitales. La decisión está en manos de los parlamentarios pero recordó que “en todos los países de la Unión Europea existe un tratamiento fiscal similar”. Tanto empeño en que paguen los ricos para conseguir tan poco. Curiosamente en la primera legislatura de Zapatero quitaron el impuesto al patrimonio, el cuál sí que gravaba a los ricos.

El Presidente Barack Obama ha anunciado, hace unos días, que recortará impuestos a las empresas por valor de 100.000 millones de dolares. Aumentará y extenderá beneficios fiscales a las empresas que inviertan en investigación y desarrollo en suelo estadounidense y por tanto fomenten empleo. Pero no se queda ahí, también ha propuesto una reducción de impuestos a la clase media y más inversiones en energías limpias y en infraestructuras. Estas medidas tratan de impulsar la economía, ya que no está creciendo al ritmo adecuado. Estamos ante dos concepciones opuestas de la participación del Estado en la economía. En la primera prevalece la intervención, una gran presión fiscal y protagonismo del Estado en la economía. En la segunda se reduce el papel del gobierno y se da el protagonismo a los individuos. Cuando yo era adolescente había un Presidente de Estados Unidos que era ridiculizado, en algunos medios, por su pasado de actor secundario. Se decía que se había divorciado de su mujer, la también actriz Jane Wyman (la recordarán como Ángela Chaning), por la envidia que tenía, al ver que ella tenía éxito en su carrera y él no conseguía buenos papeles. Este caricaturizado Presidente se llamaba Ronald Reagan y dejó una frase para el futuro que merece ser recordada por su acierto y actualidad “ El crecimiento, la prosperidad y el bienestar se generan desde abajo, no desde el Estado. Sólo cuando se deja que el espíritu humano invente y cree, sólo cuando los individuos pueden tomar sus decisiones libremente y obtienen recompensa personal cuando tienen éxito, sólo entonces las sociedades están económicamente vivas y son dinámicas y libres”.

jueves, 16 de septiembre de 2010

El papel del Estado (publicado en Diario de Navarra el 16-9-2010)

El segundo semestre puede ser penoso, preocupante y muy difícil si además de subir el IVA se retiran las ayudas", afirmó en Diario de Navarra el pasado mes de abril el presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios, Juan Antonio Sánchez Torres. Y por desgracia, el tiempo le ha dado la razón, con una caída del 55,8% en Navarra en julio. Obviando el IVA, que da para otro artículo, mis dudas se centran en responder para qué han servido. ¿Han servido para mejorar el crecimiento del PIB, para mejorar el medioambiente, para ser más eficientes y más equitativos?
Crecimiento: pudimos leer, también en abril, "el sector del automóvil tira de la economía con un repunte del 9,4%". Parece que hay un efecto positivo en el PIB, pero esto es lo que se ve. La paradoja de los cristales rotos de Frédéric Bastiat, explica en su libro Lo que se ve y lo que no se ve (1839) la siguiente historia: Un bribonzuelo lanza una piedra y rompe el cristal de una carnicería. El carnicero sale desolado y clama justicia. Pero se acerca un señor que explica a la gente expectante que en realidad no es tan malo. Ahora el carnicero deberá cambiar el ventanal y eso es bueno para el cristalero, el cual facturará más. Y por ende, también para la economía en general porque aumentará el PIB. La muchedumbre queda convencida y dejan solo al carnicero con su infortunio. Ésta es la base sobre la que se sustenta la bondad de estimular la demanda porque provocará que se incremente la riqueza. Pero esto es lo que se ve. Falta lo que no se ve. El carnicero pudo haber comprado otras cosas, por ejemplo, un traje. La ventaja del cristalero la pierde el sastre, por lo que lo comido por lo servido. Lo único que queda (resultado neto) es el cristal roto. En el caso de la compra de coches vemos que se estimula la economía de los fabricantes y concesionarios, pero no vemos los sectores perjudicados directamente como los vendedores de coches de segunda mano. Y mucho menos los sectores a los que hubiera ido el gasto que hemos dedicado al automóvil. Productividad: ¿Y por qué hay que achatarrar un coche que funciona? El antiguo presidente de Toyota Sakichi Toyoda decía que las máquinas que viven por encima de su vida útil eran "fuentes de oro". Todo lo que producían era una ganancia inesperada por encima del beneficio que se predijo con su compra. Así pues, las exprimía hasta la última gota. ¿Por qué no aguantar un año más con el coche si funciona? En medioambiente; ¿Existe una mejora? Cuando menos hay dudas. La menor polución de los nuevos modelos está demostrado por Michael Gerrard de la Universidad de Columbia que es inferior al coste medioambiental de su fabricación. La equidad: "¿Y por qué no me dan subvenciones a mí?, ¿Acaso yo no creo empleo?" Es la pregunta que se hace el resto de sectores no agraciados. Para ellos son injustas y crean adicción en los sectores premiados.

No son neutras fiscalmente. Nada es gratis. No olvidemos el déficit. Estamos viendo incrementar las subvenciones en un momento muy complejo para el erario público. Los estados están pagando caros sus déficits y restando financiación al resto de la economía. En Navarra somos originales en el tratamiento fiscal ya que, el Plan Renove, las ayudas por ventanas y calderas no tributan pero sí las reformas de vivienda y el alquiler joven. La Hacienda Estatal hará tributar por todas ellas. Como decía Benjamin Franklin, "nada puede decirse que es cierto en este mundo, excepto la muerte y los impuestos". El problema de fondo es que vemos a los estados ocupar el lugar que corresponde a los ciudadanos. Alteran las decisiones de éstos por entender que sus intervenciones arreglarán los desequilibrios, sin tener en cuenta que crean problemas nuevos sin haber solucionado los iniciales. Las decisiones de compra deben ser de los ciudadanos y no delegarse en el Estado. Otra cosa son decisiones en otros campos como el de la salud. Yo no soy capaz de decidir cuál es el tratamiento que me conviene cuando estoy enfermo. Por eso acudo al médico de mi confianza para que me aconseje. Pero, sí estoy capacitado plenamente para cambiar de coche si me conviene y no porque me estimulen con subvenciones

jueves, 2 de septiembre de 2010

Subir los Impuestos (Publicado en Diario de Navarra el 2.9.2010)

No hace falta ser profeta para anunciar que nos van a subir los impuestos. No porque no se pueda hacer otra cosa, sino porque son incapaces o no quieren buscar alternativas. Han dado el primer paso al lanzar una primera avanzadilla para sondear a la opinión pública. D. José Blanco, Ministro de Fomento, ha afirmado que España está por debajo de Europa a nivel impositivo. Por tanto, subamos los impuestos para ser europeos.

Volvemos al trasnochado complejo pueblerino de no considerarse europeo de pleno derecho. Y además, ¿ya se les ha olvidado que nos acaban de subir el IVA, IRPF, Rentas de Capital,.? ¿Por qué no nos igualamos en otras áreas de más interés, como el fracaso escolar, en el que estamos en el vagón de cola?. ¿Vamos a tener un mejor servicio público por pagar más? O solo se pretende tapar algún agujero, como dicen coloquialmente los malos pagadores. "No hay ningún texto económico que defienda una subida de impuestos en plena crisis económica y hacerlo en plena recesión resulta catastrófico". Xabier Sala i Martín, Universidad de Columbia. Para solucionar un problema van a crear otro mayor.

¿Por qué se empeñan en secar los brotes verdes con impuestos? Esta nueva ronda de saqueo de nuestros bolsillos llegará con el nuevo presupuesto. Cualquiera sabe que si gastas lo que no tienes e ingresas cada vez menos, tarde o temprano tendrás
problemas. En el caso de un particular podrás perder tus bienes que serán embargados e incluso puedes acabar con tus huesos en la cárcel. Como dice D. Leopoldo Abadía: "Si a una familia se le va la olla, allá ellos. Pero si se le va la olla al que lleva mi Patria,Comunidad Autónoma o los dos a la vez, allá ellos, no. ¡allá yo¡". Se está gestionando los presupuestos generales del Estado para 2011 y hay que cuadrarlos primero con los efectos de la crisis y los estabilizadores automáticos. Y segundo por las consecuencias de las políticas de gasto realizadas. Los estabilizadores automáticos se activan en contra del ciclo económico. Por ejemplo, si aumenta el paro, el estado destinará más dinero al subsidio de desempleo. Esto implicará un mayor gasto que estimulará a la economía para suavizar el efecto drástico en la reducción del consumo. Tendremos un déficit coyuntural que terminará en cuanto volvamos a crecer. Cuando llegue el nuevo ciclo, los mayores ingresos familiares y empresariales implicarán una mayor recaudación que reducirá el déficit y por consiguiente la deuda. En nuestro país con el argumento de "Podemos endeudarnos más" (me recuerda al "Podemos" de Obama pero sin glamour), se ha desarrollado políticas estériles y caras para fomentar el crecimiento económico. Se ha dado una imagen internacional de derrochadores que ha provocado un encarecimiento del coste de la deuda. El precio de los préstamos es inversamente proporcional a la capacidad futura para devolverlos. Así pues, aunque el negocio de los financieros es prestar, nos cortaron el grifo en seco. Vieron que existía un riesgo cierto de que el desmadre de las cuentas públicas terminara por quebrar al país y convertir la deuda del Reino de España en un bono basura. Por eso vimos a Zapatero reaccionar con un giro de ciento ochenta grados con medidas impensables, hasta ese momento, como reducir el sueldo de los funcionarios, congelar las pensiones, retrasar obra pública, etc. El objetivo era conseguir que volviera el flujo de capitales al estado y a los particulares demostrando que sabe atarse el cinturón. Esta carrera de obstáculos no ha terminado. La falta de una visión general de la situación hace que se vaya gestionando cada nueva crisis de forma independiente. En vez de una estrategia a medio y largo plazo parece más las distintas entregas de una novela por capítulos. El nuevo capítulo se el titula "Cuadrar el presupuesto".

En cuanto puedan y como les dejen volverán a gastar. Ya se han revisado los recortes del Ministerio de Fomento para resucitar alguna de las obras aplazadas. Si fallan de nuevo la cuenta la pagaremos los de siempre.